Un año más, los foguerons y las ximbombes tomaron las calles de sa Pobla la noche del viernes, que se alargó hasta al amanecer. Aunque en los últimos años las casas particulares y los bares y pubs han tomado el relevo a las hogueras en plena calle, en la revetla de este año se volvió a colgar en cartel de completo en plena calle.
Y es que al celebrarse en viernes por la noche, fueron muchos los que aprovecharon para desplazarse hasta sa Pobla y sumarse a una de las fiestas con más nombre de la isla. Además, una de las principales novedades de la programación de este año fue la ximbombada colectiva, que empezó a la una de la madrugada en la Plaça Major y que tiene como principal objetivo incentivar los grupos de ximbombers que hagan sonar su instrumento al mismo tiempo que cantan las mejores gloses.
Además, durante la noche del viernes, los botifarrons, la llonganissa y la espinagada se convirtieron en los productos estrella.
Y es que ya se sabe que el día 16 por la noche, en sa Pobla, los protagonistas son los productos locales.
M. Ramis
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