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La presidenta del PP balear, Rosa Estaràs, pidió ayer al president del Govern, Francesc Antich, que se someta una cuestión de confianza en el Parlament para saber si tiene el apoyo de todos los diputados que le votaron en la investidura. Estaràs recordó que Antich dijo en octubre en el Parlament que no quería seguir utilizando el voto de Bartomeu Vicens, ex diputado de UM. «Ha utilizado el voto de Vicens en la mayor parte de los presupuestos. Todos los ciudadanos de las Islas Baleares tenemos derecho a saber con qué apoyos cuenta Antich», señaló Estaràs.

Sin embargo, la presidenta del PP manifestó que en estos momentos todavía no se cumplen las condiciones para que su partido presente una moción de censura en la Cámara. «Para la moción de censura deberían producirse una serie de circunstancias de inestabilidad manifiesta que hoy no se dan del todo», planteó la líder del PP.

Obligado a dimitir
No obstante, Estaràs reconoció que UM tiene más afinidad ideológica con el PP que con partidos políticos como Els Verds. Si Antich presentase una cuestión de confianza y la perdiese, estaría obligado a dimitir como presidente. Munar debería convocar la Cámara en un plazo de 15 días para elegir al nuevo president.

En rueda de prensa en un paréntesis de las jornadas parlamentarias del PP, Estaràs pidió también al Govern que revise sus previsiones económicas para el próximo ejercicio. El Ejecutivo, recordó Estaràs, ha previsto un crecimiento del 0'8 por ciento.

Estaràs lamentó que Antich no comparezca en el Parlament para debatir propuestas para salir de la actual crisis económica. En este sentido, Estaràs dijo que la Diputación Permanente de la Cámara se reunirá el día 28 pero lamentó que no tenga previsto solicitar la comparecencia del president Antich.

Para salir de la crisis económica, Estaràs volvió a plantear la necesidad de recortar el número de altos cargos del Govern.
Asimismo, Estarás pidió, con el fin de reducir costes, el cierre de Televisión de Mallorca y Ona Mallorca, medios de comunicación que dependen del Consell. Estaràs planteó que los trabajadores podrían ser asumidos por IB3. «Es un coste innecesario», denunció.

A propósito de la cuestión de confianza, el portavoz del grupo socialista, Antoni Diéguez, opinó que la propuesta es «un simple brindis al sol» y matizó que «constituye una demostración clara de impotencia política», según informa Efe.