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M.JUNCOSA El Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Mallorca prevén que el número de viviendas visadas o proyectadas se reduzca a menos de mil en Mallorca en 2009, frente a las 10.191 del año 2007 y las 3.632 de 2008, como consecuencia de las restricciones financieras que están aplicando bancos y cajas de ahorros y por la propia crisis económica.

Así lo afirmó ayer el presidente del Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Mallorca, Jaime Gibert Salamanca, durante la presentación del balance estadístico de la edificación que anualmente elabora la entidad, el cual indica que el número de viviendas visadas se desplomó un 64 por ciento el año pasado en Mallorca.

A juicio de Gibert esta caída de proyectos es «especialmente» preocupante en términos de empleo directo para el sector de la construcción , así como en las industrias auxiliares. «Es un dato que asusta porque hemos pasado de visar casi 1.000 viviendas mensuales en 2007 a 78 viviendas en enero de este año toda Mallorca», afirmó Jaime Gibert.

El presidente del Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos recordó, incluso, que en 2002, año de plena vigencia de la moratoria de edificios plurifamiliares (bloques de pisos) del Consell de Mallorca, se visaron en la Isla unos 4.000 pisos, entre plurifamiliares con licencia anterior, chalets y adosados, frente a los 3.632 proyectos de todo 2008 o los mil previstos para 2009. «Será un problema para el empleo», afirmó.

Además, Gibert indicó que existe un volumen importante de proyectos visados que no se realizarán o se demorarán en el tiempo, caso de las promociones de Núñez y Navarro o Mapfre en la fachada marítima de Palma u otros proyectos de promotoras mallorquinas importantes, «por lo que la caída será todavía mayor», según afirmó.

Estadísticas de 2008 El balance dado a conocer ayer por el Colegio de Aparejadores pone de manifiesto que los proyectos de edificación cayeron en 2008 en el conjunto de tipologías de viviendas. En concreto, el número de chalets proyectados descendió un 48 por ciento, hasta 640 unidades; las viviendas adosadas se hundieron un 59 por ciento, hasta 339 unidades; mientras que el número de pisos visados se desplomó un 67'4 por ciento, hasta 2.653 viviendas.

En cuanto a las viviendas acabadas, el Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos indica que el año pasado se produjo un crecimiento del 3'3 por ciento, al pasar de las 8.286 registradas en 2007 a las 8.541 del año pasado.