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«No tengo ningún patrimonio oculto ni nada que ocultar», asegura el ex president de Balears Jaume Matas mediante una nota hecha pública ayer desde su oficina en Barceló Crestline Corporatios de Washington.

Matas recuerda que cuando tuvo conocimiento de que se le habían abierto unas declaraciones informativas «secretas» por parte de la Fiscalía «entramos un escrito para ponernos a su disposición y aportar toda la información necesaria. Hasta hoy sin respuesta...»

Respecto a los inmuebles que ha ocupado en Madrid, el ex president detalla que tuvo dos pisos alquilados en las calles de Goya «al final de mi estancia» en la capital y a continuación otro en la calle Ramón de la Cruz «donde residen mis hijos que trabajan o estudian en Madrid. Ambos a precio de mercado». En relación con este punto, Matas indica que «puestos en conocimiento de las últimas indagaciones en Madrid, la semana pasada, reiteramos el ofrecimiento de mi colaboración. Concretamente el contrato de alquiler en vigor y cualquier otro dato que se pueda requerir. Hasta hoy, tampoco sin éxito».

Matas cierra su declaración expresando que «ahora la nueva vía de difamación es decir que 'existen sospechas fundadas'». Considero que cualquier acusación, velada o no, debe ser probada. Porque en caso contrario, es falsa y es una calumnia».

Por último, el ex president declara que «no quiero ningún derecho que no me corresponda. Pero tampoco quiero que se me nieguen los derechos que tienen el resto de ciudadanos. Exijo que una diligancias informativas que son secretas, lo sean, porque de lo contrario se está comentiendo un delito. Exijo mi derecho a defenderme y a poder explicar la verdad. Exijo, por último, respecto a mi privacidad y a la de mi familia».