Imagen del grupo de estudiantes que participaron ayer en una jornada gastronómica dedicada a la cocina árabe, junto a profesores y asesores de esta particular jormada.

TW
0

Ensalada de zanahoria, de patata con menta, cuscús de habas, tortilla de berenjenas, frit de cordero de Marruecos o pollo con aceitunas fueron algunas de las recetas que durante el día de ayer cocinaron una treintena de alumnos del IES Calvià, en el marco de la celebración de una jornada gastronómica árabe. Cultura y cocina se dan la mano en una jornada en la que la gastronomía mallorquina y la árabe coinciden en similitudes, exceptuando el uso del cerdo, vino y la sangre, que por cuestiones religiosas no forman parte de la riqueza culinaria árabe. Los alumnos trabajaron desde principio de esta semana los 17 platos presentados ayer en el Hotel Escuela de Calvià, sito en las instalaciones del hotel HM Royal Beach de Magaluf.

«La cocina árabe guarda semejanzas con la mallorquina, aunque está más condimentada. Pero ambas utilizan el mismo sistema de cocinado, a excepción de lo que marcan las religiones. La verdura y la fruta forman una parte importante de su dieta y predominan las carnes de cordero y de ternera», afirma Joan Abrines, profesor de Cocina.

En el menú no podía faltar la sopa de Ramadán, con garbanzos, lentejas y carne de cordero. «Es como nuestro cocido madrileño. Cada día durante el Ramadán se come esta sopa», añade Abrines.

Ésta es la cuarta jornada que organiza el IES Calvià en la que se entremezclan la cultura y la gastronomía. De hecho, ya se han realizado jornadas gastronómicas dedicadas a las cocinas romana, griega y judía. «Cada año contamos con la participación de cien comensales. En esta jornada están implicados, aparte del departamento de hotelería y turismo, los departamentos de imagen y sonido y lenguas clásicas», afirma. lMercedes Azagra
Fotos: Jaume Morey