El president Antich, con Miquel Nadal cuando tomó posesión del cargo de conseller de Turisme del Govern balear. Antich pidió ayer al conseller y presidente de UM que retirara la enmienda que ha generado la polémica.

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TORRES BLASCO/JUAN MESTRE
Antich, sin embargo, expresó su confianza a que esta enmienda se retire antes del debate y que se reconduzca la situación. El president Antich pidió expresamente a UM que retirara la enmienda y aseguró haber solicitado al presidente de ese partido, el conseller Miquel Nadal, que considerara otras alternativas. El resto de partidos del Govern se oponen al proyecto y dicen que el pacto de gobernabilidad prohibe expresamente nuevos campos de golf.

Antich, tras la clausura del congreso de CC OO, afirmó que «no entra en mis planes» destituir a Nadal como conseller y que «el pacto no está roto» pero remarcó que el Ejecutivo «no puede dar apoyo a seguir creciendo en oferta complementaria y campos de golf, pero sí que hay que atender a la situación concreta de aquellos municipios que se han esmerado para que su territorio esté protegido».

El president confió en hallar «otras compensaciones» para el municipio de Campos.
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En el mismo sentido, aunque con matices diferentes (mucho más duros con Nadal) se expresaron los portavoces parlamentarios del PSOE y del Bloc, Antoni Diéguez y Biel Barceló respectivamente. Además, la consellera portavoz , Joana Barceló, se refirió a que en todo este asunto había más «ruido» que otra cosa y confió en una solución. Para Barceló, esta claro que el decreto que UM quiere enmendar «no está pensado para «incluir una media de carácter particular» como el golf de Son Baco.

Díeguez, desde el PSIB, sugirió que «no toda UM» comparte el contenido de la enmienda y se refirió en todo momento a «la enmienda Melià».
El líder socialista indicó que los socialistas no comparten «la conveniencia u oportunidad» de presentar esta corrección para permitir la construcción del campo de golf de Son Baco acompañado de oferta turística complementaria, «con la creación de 25 bloques de aparthoteles cerca de Es Trenc», por lo que «no votaremos a favor de la enmienda». No obstante, auguró que ésta «no llegará a ser votada en ningún momento» y aseguró que puede haber alternativas. Diéguez se pronunció antes que Antich pero se mostró convencido de que «el president, como en otras ocasiones apagará el fuego».

El más duro en sus apreciaciones fue Biel Barceló quien dijo que UM había incumplido tres compromisos (el pacto de gobierno entre ellos) y que advirtió que si «UM quiere hacer políticas de derechas, que se vaya con el PP, nosotros no apoyaremos esa propuesta».

Barceló planteó la posibilidad de retirar el proyecto de ley objeto de la enmienda para evitar su debate y votación.
Desde Unió Mallorquina, el diputado Josep Melià negó que esta formación política haya cometido un acto de deslealtad al presentar una enmienda para autorizar a través del 'decreto Nadal' el campo de golf de Son Baco. «Si hubo deslealtad, la cometió Francina Armengol cuando decidió no autorizar el golf de Son Baco en el Consell de Mallorca», declaró Melià, que tuvo que esperar a la firma de la enmienda por parte de la portavoz del grupo mixto, Esperança Marí.

UM no tiene ninguna intención de retirar la enmienda y también rechazará cualquier alternativa que no pase por autorizar el campo de golf de Son Baco. El acuerdo de presentar dicha enmienda se aprobó en la ejecutiva del partido celebrada el pasado lunes. Desde el PP, su presidenta, Rosa Estaràs, anuncio que su formación política también presentará una enmienda en los mismos términos. El PP ya anunció en rueda de prensa hace varias semanas que quería aprovechar el 'decreto Nadal' para impulsar el campo de golf de Son Baco ante la decisión de paralizarlo desde el Consell de Mallorca.