La presidenta del PP balear, Rosa Estaràs, anunció ayer que su partido acudirá ante los tribunales para denunciar la «persecución política» que padecen algunos dirigentes del partido por parte del gobierno de izquierdas por su gestión sobre el metro de Palma.
En rueda de prensa, Estaràs explicó que en los próximos días emprenderán acciones legales por «falsa denuncia» ante la campaña que está sufriendo la formación «y que no queremos tolerar», advirtió.
Según afirmó, el tema del metro es «el exponente de la persecución política más grave que está soportando el PP por parte del Govern», al tiempo que remarcó que «no tolerarán que se calumnie y se injurie a las personas simplemente porque ahora es una moda impuesta por los partidos de izquierdas».
Asimismo, incidió en que el expediente del metro «está hecho de acuerdo con la legalidad», y que las expropiaciones «respetaron escrupulosamente la legalidad y todo el proceso», por lo que «no es de recibo que se siga en la línea de calumniar e injuriar a toda una organización», cuando hay personas que han trabajado «diligentemente, siempre de acuerdo con la ley y de manera escrupulosa», lamentó al respecto.
Rosa Estaràs anunció que su partido presentará una serie de iniciativas en el Parlament para que los ciudadanos «puedan expresarse libremente en cualquiera de las dos lenguas oficiales» de la comunidad, tanto en las escuelas como en la vida diaria.
Estaràs ha asegurado que su partido buscará «recuperar el espacio lingüístico que las políticas del Govern han roto» .
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