El PP acusó ayer a la alcaldesa Aina Calvo de «hipotecar el futuro económico de Palma» con su proyecto de Façana Marítima, según el portavoz del grupo municipal, Rafel Duran. La formación presentó catorce alegaciones a los dos convenios suscritos entre el Ajuntament de Palma y Mapfre, que incluyen el acuerdo de permuta de solares alcanzado por la institución y la entidad.
Cort y Mapfre conveniaron el intercambio de un solar propiedad de la empresa en primera línea por otros dos públicos en segunda para, de esta manera, poder desarrollar el proyecto de Façana Marítima. Además, el Ajuntament también condonó parte de la deuda que Mapfre tenía con el consistorio. Según el PP, el acuerdo «duplica a Mapfre la edificabilidad», ya que pasa «de 15.000 a 30.000 metros cuadrados», aseguró la regidora popular Lourdes Bosch.
Bosch afirmó que el texto incumple dos leyes, la de Habitatge, porque «no reserva un 30 por ciento del suelo para viviendas de protección oficial», y la de Ordenació Territorial, porque «el Pla General d'Ordenació Urbana está congelado mientras se adapta al Pla Territorial».
Según Bosch, «la condonación de la deuda y los terrenos públicos entregados a la empresa supondrán un coste para Palma». Un coste que se incluye dentro del proyecto de Façana Marítima y que, para Duran, supondrá una inversión de «150 millones de euros». El portavoz afirmó que «la zona de servicios ajardinada», como definió a la zona verde de la Façana Marítima, supondrá «45 millones de euros», a lo que habrá que sumarle «los 95 millones que pide Núñez y Navarro», una cantidad que para Duran es «desproporcionada» para Palma.
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