Sorpresa y preocupación en Balears son las reacciones más generalizadas que han provocado los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) referidos al primer trimestre de este año, los cuales elevan al 19'78 por ciento "dos puntos y medio por encima de la media estatal" la tasa de paro en las Islas que en cifra absolutas significan 110.800 personas, 41.300 más que en el último trimestre de 2008. Los datos son alarmantes, una valoración en la que también coinciden todos los estamentos políticos, empresariales y sindicales.
La portavoz y consellera de Treball del Govern, Joana Barceló, admitió que el resultado de la EPA ha sobrepasado ampliamente las proyecciones de la evolución del mercado laboral en Balears, que a pesar de todo sigue generando puestos de trabajo, aunque no ocultó su escepticismo sobre la realidad de los datos de la encuesta. De hecho, el Govern financiará la ampliación del muestreo que realiza el Instituto Nacional de Estadística para ajustar al máximo la EPA en el conjunto de la Comunitat Autònoma.
De todos modos no se puede perder la perspectiva que detrás de la frialdad estadística se encuentra la realidad de miles de familias y personas que en algunos casos no tienen acceso al cobro del subsidio por desempleo, una situación de la que dan fe el espectacular incremento en la demanda de los servicios sociales.
Frente a esta situación, el Govern está llamado a liderar la confección de un paquete de actuaciones destinado a minimizar los efectos de la recesión económica sobre los desempleados junto con los agentes sociales, empresarios y sindicatos. Es necesario aunar esfuerzos para superar entre todos esta crisis.
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