Los pocos empresarios que están iniciando alguna promoción de viviendas o están comprando solares para edificarlas en el futuro comercializarán los pisos resultantes a precios hasta un 30 por ciento inferiores a los de los tiempos del 'boom' inmobiliario, antes del estallido de la crisis financiera y económica, según sostiene el presidente del Colegio de Aparejadores o Arquitectos Técnicos de Mallorca, Jaume Gibert Salamanca.
El presidente del colegio afirma que los promotores que están tomando posiciones en el mercado de terrenos, principalmente de pequeños solares o edificios urbanos a demoler y reedificar, sólo están dispuestos a comprar a precios inferiores a los de los años de bonanza, con el objetivo de poderlos colocar en el mercado.
Gibert explica que en recientes operaciones de adquisición de solares para desarrollar pequeñas promociones los precios de repercusión sobre cada vivienda se han reducido hasta niveles de 42.000 ó 48.000 euros (siete u ocho millones de pesetas), frente a los 102.0000 ó 108.000 euros (17 ó 18 millones de pesetas) que se llegaron a pagar antes de la crisis financiera.
El presidente del Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Mallorca afirmó que la bajada de los precios inmobiliarios podría ser mayor si Govern y ayuntamientos ampliarán las densidades de viviendas permitidas por superficie de terreno, lo que redundaría en una reducción mayor del precio de repercusión de solar por cada vivienda con un menor consumo de terreno.
En cualquier caso, el balance de edificación del primer cuatrimestre del año elaborado por el Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Mallorca indica que los proyectos de construcción de viviendas se encuentran en mínimos históricos en Mallorca, incluso por debajo de los años de vigencia de las moratorias urbanísticas del Consell de Mallorca de principios de la década.
En concreto, en los cuatro primeros meses del año se han visado en Mallorca proyectos de construcción de 436 viviendas, frente a las 2.023 del mismo periodo del año pasado o las 3.781 del primer cuatrimestre de 2008, en pleno 'boom' inmobiliario.
El presidente del Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Mallorca estimó que la Isla verá reducida la producción de viviendas nuevas desde las 11.0000 de 2007 y las 5.000 de 2008 hasta unos niveles de aproximadamente un millar en 2009.
Jaume Gibert afirma que esta reducción en los proyectos de construcción residencial, que se produce especialmente en el segmento de promociones de edificios plurifamiliares (bloques de pisos), es consecuencia directa de la crisis financiera y generará un grave impacto en el sector de la construcción e industrias auxiliares de las Islas, tal y como ya está sucediendo en términos de destrucción de empleo y cierres empresariales.
En cualquier caso, el presidente de los aparejadores consideró que este recorte de actividad permitirá al sector «volver a la normalidad» tras un periodo de crecimientos desmesurados.
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