El conseller d'Economia i Hisenda, Carles Manera, no descarta presentar un plan de saneamiento a final de año ante el déficit que están acumulando las arcas autonómicas como consecuencia de la reducción de los ingresos por la crisis económica. Según los últimas cifras oficiales aportadas por el Govern, los ingresos por tributos han disminuido un 35 por ciento, lo que provocará un déficit presupuestario.
El Govern está a la espera de conocer la evolución de la economía en los próximos meses para poder compensar el déficit presupuestario que previsiblemente se producirá a final de año. Según el conseller d'Economia, Carles Manera, en octubre se buscará una salida a la actual situación.
El Ejecutivo espera que el incremento de la financiación autonómica permita, al menos este año, mitigar los efectos del déficit presupuestario. Aun así, el Govern deberá recurrir al endeudamiento previsto -más de 700 millones- para poder cuadrar sus cuentas.
El Govern se había propuesto a finales del pasado año que el incremento de la financión sirviese para reducir el endeudamiento. Sin embargo, la rebaja de los ingresos por impuestos propios obligará a cambiar de planes.
En estos momentos, el Ejecutivo utiliza pólizas de crédito para mantener la liquidez económica en tesorería. Manera explicó a este diario que en octubre y noviembre se suscriben los diferentes préstamos bancarios para cubrir las pólizas que se hayan podido solicitar durante el ejercicio presupuestario.
A pesar de las dificultades, el Ejecutivo niega que en algún momento haya habido problemas de liquidez para poder abonar los sueldos de los funcionarios.
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