La Asociación de Empresarios de Automoción de Balears (Aseda), Industria-PIMEM, concesionarios y consumidores de las Islas coincidieron ayer en en señalar en que no entienden la reticencia del Govern para no sumarse al plan de ayudas directas aprobado por el Gobierno central para estimular las ventas en un sector afectado de lleno por la crisis económica. El Govern, por su parte, afirma que «no hay presupuesto para asumir el pago de 500 euros por coche», según explicó ayer la consellera de Indústria, Comerç i Energia, Francisca Vives.
Aseda, PIMEM y concesionarios apoyan el plan del Gobierno, ya que se incentiva con 1.500 euros (500 el Gobierno y 1.000 los fabricantes) para la compra de un nuevo vehículo. La medida, que entró en vigor ayer, pilló por sorpresa a todo el sector de automoción, de ahí que el presidente de Aseda, Miguel Pastor, indicara que «la improvisación se ha traducido en una confusión general, más aún cuando la medida, en la que tienen que participar las comunidades autónomas, no se ha consensuado».
Pastor añadió, que si finalmente Balears no aporta la ayuda se creará malestar entre los vendedores y fabricantes de vehículos. «La decisión se recibiría con mucha extrañeza».
La consellera Vives aseguró ayer que «no hay presupuesto para asumir el pago de 500 euros para la compra de coches. Esta medida «no estaba contemplada» en los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma, por lo que depende exclusivamente» del nuevo sistema de financiación autonómica».
PIMEM indica que «no existe ninguna excusa razonable o plausible que justifique la aprobación de este tipo de ayudas. Es un absoluto despropósito que el ejecutivo autonómico aún titubee en relación a la propuesta lanzada por el Gobierno central, ya que supone una contradicción fragante con las políticas de movilidad que supuestamente pretende impulsar».
La reacción de los consumidores ayer fue de apoyo total a la medida del Gobierno central y de crítica generalizada al Govern por no sumarse. Los concesionarios de Palma y de la Part Forana recibieron multitud de llamadas, así como de visitas de compradores para interesarse «in situ» por la compra de coches. «La gente está muy bien informada, casi más que nosotros, ya que se han documentado por internet», puntualizaron desde varios concesarionarios.
En este aspecto, Jaume Serra, de 26 años y natural de Sa Pobla, resumía ayer en un concesionario el sentir general de los consumidores: «Cuantas más ayudas tengamos mejor y el Govern tiene que sumarse a la medida, ya que beneficia a los consumidores y a modernizar el parque automovilístico de las Islas. Creo que el Govern tiene que replantearse su decisión».
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