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El president del Govern, Francesc Antich, compareció ayer en el Parlament para explicar los detalles del nuevo modelo de financiación en un debate donde sus socios reconocían el avance pero, a la vez, advertían que no es la solución definitiva ante los problemas de Balears. Tanto UM como el Bloc reconocían que el Govern ha hecho un gran esfuerzo, que se mejora en relación al anterior sistema, pero que se hubiese podido conseguir algo más.

Antich comparecía en la Cámara «con satisfacción», según sus propias palabras, ya que se ha conseguido el objetivo marcado por el Parlament: garantizar que la financiación sitúe a Balears en la media. «El nuevo modelo pone fin, explícitamente, a la grave injusticia que Balears ha padecido en los últimos ocho años», recalcó Antich.

El presidente balear reconocía que uno de los objetivos del Govern era «redimensionar» el fondo de suficiencia, es decir, el fondo que equilibra la riqueza de las comunidades autónomas. Balears y Madrid son las únicas autonomías que tienen que aportar dinero a dicho fondo. En opinión del president, el nuevo modelo supone un avance ya que existirá en el futuro una mayor equidad en la financiación per cápita de las autonomías.

Asimismo, Antich cree que se ha satisfecho la reivindicación para que se tenga en cuenta el incremento de la población que ha registrado Balears en la última década. «El trabajo no ha sido fácil», recalcó el president balear.

Nuevos recursos

Antich explicó que en el primer año de ejecución del nuevo modelo, Balears percibirá de manera adicional el 70 por ciento de los nuevos recursos. En 2010, el 85 por ciento. A partir de 2011 y 2012, el 100 por cien. «La aplicación estricta de los criterios aporta una financiación de recursos adicionales per cápita de 485 euros», informó Antich. El president calcula que el nuevo sistema supondrá 500 millones adicionales, una cantidad que se ajustará en la comisión bilateral mixta que se hará una vez que se apruebe el nuevo modelo en el Congreso de los Diputados. En este sentido, Antich advirtió que el Govern estará «vigilante» en las futuras negociaciones con el Gobierno central.

El tono que utilizaron los socios de gobierno de Antich no fue especialmente crítico, pero UM y el Bloc sí expresaron que el nuevo sistema, aunque mejora la situación actual, no será la solución definitiva de los problemas de financiación de Balears. Así, Josep Melià, portavoz de Unió Mallorquina, asumía el avance del nuevo sistema. «Desde la lealtad del trabajo hecho, UM no puede dejar de manifestar su satisfacción sobre el fondo de modelo, pero se mantienen un déficit de 3.200 millones de euros respecto a Balears. El problema de fondo de la economía balear persiste», dijo Melià.

En la misma línea se pronunció Biel Barceló, portavoz del Bloc. Al inicio de su intervención, Barceló dijo: «Señor Antich, usted, yo y todos hemos pasado por el calzador. Fuera del sistema se está peor», dijo. Para Barceló, falta transparencia con el nuevo modelo de financiación, es injusto y depende de la voluntad política del Gobierno central. «Se hace un uso perverso de la solidaridad», dijo.

«Este resultado ha sido posible ya que la sociedad civil, las fuerzas políticas y el Govern se han unido para pedir, de forma rigurosa, un trato justo e igualitario para nuestras Islas», destacó el president del Govern durante su intervención. Antich agradeció el sentido común y el talante constructivo de «los agentes más dinámicos y rigurosos de la sociedad balear». El president del Govern citó a la plataforma cívica que preside Alexandre Forcades. Por su parte, la presidenta del PP, Rosa Estaràs, declaró en Madrid que hay «algo oscuro» en el nuevo modelo cuando no se dan las cifras de financiación. Rosa Estaràs lamenta que tenga que recurrirse a un incremento del déficit público para poder satisfacer las necesidades de las autonomías con el nuevo sistema de financiación.