Un total de 169 personas han sido atendidas por el servicio diurno de las unidades móviles de emergencia social, en los siete meses que ha durado la experiencia piloto que ha llevado a cabo el Consell de Mallorca, a través del Institut Mallorquí d´Afers Socials, y la Creu Roja Balears.
Así lo explicó ayer el conseller de Benestar Social y presidente del IMAS, Jaume Garau, acompañado del presidente de Creu Roja Balears, Miquel Alenyà, manifestando que el citado proyecto piloto ahora se consolidará y pasará a ser «otro de los recursos que integran la red de inserción social del Consell de Mallorca».
Los objetivos del servicio, ahora ampliado, responden a las necesidades detectadas por el Observatori Social de la Crisi, y consisten en ofrecer asesoramiento e información sobre los recursos sociales y sanitarios normalizados, motivando a los usuarios para que los utilicen. Además realizan acompañamientos a recursos sociales y sanitarios normalizados.
También llevarán a cabo entrevistas de seguimiento y darán apoyo psicosocial para motivar el inicio de un proceso de inclusión social de personas en situación de vulnerabilidad y derivar a recursos sociales y sanitarios a las personas que lo requieran.
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