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Con una asistencia de público sin precedentes, se celebro ayer el ya tradicional carnaval de la Platja de Palma en su XXXIV edición que reunió a alrededor de 700 participantes de todas la edades
«La asistencia de visitantes a lo largo de todo el recorrido ha sido lo más destacado del festival de este año, que ha reunido a un total de 21 comparsas, 20 carrozas, 10 grupos y 3 grupos de caballos», indicó Jesús Sánchez, gerente de la Asociación Empresarial de Actividades Turísticas.
La vistosidad y variedad de los disfraces exhibidos tiñó de color e imaginación la primera línea de la Platja de Palma desde Son Verí hasta la plaza de las Maravillas, donde concluyó con una espectacular actuación de danza del vientre a cargo de Mariola Cruz y el ballet oriental Jalhla.
Los vehículos de época abrieron el recorrido seguido por pitufos, vikingos, una vistosa boda, medias lunas, brujas, fregonas andantes , soldaditos de plomo, un bosque de hojalata, indios y vaqueros, junto a referencias de sabor local como grupos de siurells y carretons y cinematográficas, como el Mago de Oz.
Un año más pues se ha cumplido también el objetivo de implicar en la fiesta a residentes y turistas de la zona.