Bárbara Barceló saliendo de los juzgados, en los que ha declarado como testigo. | Jaume Morey

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Bárbara Barceló, ex mujer de Bartomeu Reus, a su vez ex conseller del Govern y presunto testaferro del ex presidente Jaume Matas, declaró hoy en calidad de testigo ante el juez que instruye el caso Palma Arena, y durante la comparecencia aseguró que fue el pasado verano y por la prensa cuando se enteró de que el piso «que se decía que había comprado» Reus, éste lo había alquilado a la familia Matas.

Así lo puso de manifiesto ante el titular del Juzgado de Instrucción número 3, José Castro, en relación al piso ubicado en la calle Don Ramón de la Cruz, en el barrio de Salamanca de Madrid, y que de acuerdo a las investigaciones aparece escriturado a nombre de quien también fue presidente del consejo asesor de Endesa.

Cabe recordar que la Guardia Civil emitió un informe relacionado con este piso, que figura formalmente a nombre de Reus y que según el Instituto Armado sería testaferro de éste. Pese a que, según el informe, la familia Matas paga oficialmente al mes 2.500 euros por el alquiler del inmueble, el ex presidente del Govern y su esposa serían los propietarios reales.

Durante la declaración, Barceló señaló que se separó de Reus en octubre de 2003, aunque mientras convivían juntos su ex esposo nunca le insinuó «ningún deseo o intención de comprar un piso en Madrid». Precisamente, Matas está citado a declarar el próximo martes en relación al presunto desvío de fondos públicos durante la construcción del velódromo palmesano y su posible conexión con el supuesto incremento ilícito patrimonial del ex presidente.