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El Ajuntament de Palma subvencionará hasta el 90% de los informes de los edificios que deben pasar obligatoriamente la Inspección Técnica de Edificios (ITE) este año, según informó ayer la regidora d'Urbanisme, Yolanda Garví. Cort destinará una partida de 50.000 euros, que tienen carácter retroactivo. De este modo, las personas que hayan realizado el informe este año también las podrán recibir. Las subvenciones se concederán por orden cronológico, hasta finalizar la partida destinada a este fin.
En concreto, este año están obligados a pasar la ITE 3.607 edificios de Palma, construidos entre 1900 y 1910; todos ellos se pueden beneficiar de las ayudas que ofrece Cort.
Garví explicó que la nueva línea de ayudas contempla dos subvenciones. Una de ellas va dirigida a las comunidades de propietarios o comunidades de bienes o propietarios únicos de un edificio. En este caso se subvencionará un 60% del presupuesto del informe de la ITE, con un límite de 100 euros por cada vivienda o local.
La segunda subvención es una ayuda a título personal para propietarios de locales que acrediten un nivel de renta inferior a los 12.653 euros anuales durante 2009. Las personas que cumplan este requisito recibirán una cantidad fija de 50 euros por cada piso o local. La regidora d'Urbanisme destacó que en el caso de las fincas de vecinos con menos recursos se podrá subvencionar casi la totalidad del coste del informe, que oscila entre los 200 y 600 euros, aproximadamente.
La convocatoria de esta línea de ayudas se abrirá a mediados de mayo; los interesados pueden presentar las solicitudes en las Unidades Integradas de Atención al Público (UIAP) de s'Excorxador y Avingudes antes del 30 de septiembre. Los beneficiarios de las ayudas podrán ser tanto las comunidades de propietarios, comunidades de bienes o propietarios únicos del edificios a título personal, así como personas físicas que formando parte de la copropiedad deban pagar el coste de la redacción del informe.
Estas ayudas fueron aprobadas por unanimidad en la comisión no permanente para la mejora de los mecanismos de prevención para la correcta conservación y mantenimiento de los edificios, que se constituyó a raíz del derrumbe del edificio de la calle Rodríguez Arias, el pasado 26 de octubre, que se cobró la vida de siete personas.