Los vecinos de 'Corea' llevan tres años esperando la visita de la alcaldesa

«Carencias son todas». Así de contundente respondía la presidenta de la asociación de vecinos del Camp Redó, Gavina Hernández, al ser preguntada por las principales carencias de la barriada. Además, expresó su malestar porque llevan tres años esperando que la alcaldesa Aina Calvo los visite, para que tome conciencia de la necesidad de solucionar sus problemas. «La señora Palou (regidora d'Habitatge) es la única que da la cara; la alcaldesa no quiere venir», denunció Hernández apoyada por los vecinos de la zona.
Además, criticó la lentitud con la que se está desarrollando el proceso de rehabilitación de la zona. «Hace siete años dijeron que iban a tirar las viviendas, después que las iban a reformar y esto no va para delante; parece que está estancado. Llevan dos años y medio de retraso en el primer bloque», lamentó Hernández.
Otros vecinos de la zona reprocharon a la alcaldesa que también se haya olvidado de ellos a la hora intentar solucionar el problema del botellón. «Nosotros empezamos el botellón a las 8 de la mañana en Colliure y nuestros hijos ven como beben y se drogan», narró una vecina.
Los vecinos explicaron estos y otros problemas al PP de Palma, que ayer comenzó en Corea la ronda de visitas a las zonas con más problemas de la ciudad; la alcaldesa no aceptó la invitación de los populares. «El PP ha querido venir para vivir la realidad de aquella Palma a la que el equipo de gobierno cierra los ojos. Los vecinos están peor que hace tres años y la alcaldesa sigue sin venir», manifestó el presidente de la Junta Territorial del PP de Palma, José María Rodríguez. Además, exigió al equipo de gobierno «que deje las moquetas y los coches oficiales y venga aquí». Rodríguez, también recriminó a Calvo que no haya invertido «nada» en esta zona; «sólo ha hecho una acción propagandística», aseveró en relación al proyecto de reforma de Corea.
El portavoz del PP en el Ajuntament de Palma, Julio Martínez, manifestó su sorpresa porque la alcaldesa no haya visitado el Camp Redò en tres años, pese a las peticiones de los vecinos. «Parece que sólo sabe visitar las zonas de Palma que tienen carril bici, aunque ella vaya en coche oficial. En cambio no se pierde ninguna de las visitas de gente importante de Madrid. Supongo que porque está más preocupada de su futuro político que por los problemas de los palmesanos», sentenció Martínez.