Asamblea anual de los testigos de Jehová, que se celebra desde el viernes en el Palma Arena. | P. Pellicer

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Más de 3.000 testigos de Jehová se dieron cita ayer en la asamblea anual que convoca a los miembros de esta religión en Balears.

Carlos Bustos, portavoz de los testigos de Jehová, valoró positivamente que la futura Ley de Libertad Religiosa que impulsa el Gobierno les equipare a las cuatro grandes religiones de notorio arraigo en España, como son los cristianos, los evangélicos, los musulmanes y los judíos.

Los testigos de Jehová, como los budistas, mormones y ortodoxos, tienen reconocida la figura legal del notorio arraigo desde hace dos años.

Sin embargo, Bustos aseguró ayer que los testigos de Jehová no tienen previsto «reclamar el derecho a un cementerio, la posibilidad de celebrar sus bodas o profesores de religión para las escuelas».

«Para nosotros es positivo que se nos reconozca, pero lo cierto es que nuestra forma de actuar no va a cambiar», añadió.

«Nosotros nos adaptamos a la sociedad en la que vivimos y no vamos a entrar en demandas o en polémicas como la del velo, de la que nos mantenemos al margen», dijo Bustos.

El borrador de la futura ley de libertad religiosa y que sustituirá a la ley de 1980 es un respaldo para los testigos, «que todavía recuerdan cuando debían esconderse para celebrar sus ritos».

Reformas en la asamblea

Este año, los miembros de este grupo no tienen prevista la puesta en marcha de ningún centro o asamblea en Balears, al margen de los que ya existen. Si bien, destacó la necesidad de reformar y arreglar algunos de ellos.La asamblea anual que se celebra en Palma aglutina a los 2.700 testigos de Jehová de las Islas, a los que cabe sumar los acompañantes y simpatizantes que no quisieron faltar al encuentro.