Alicia MateosPalma 18/02/12 0:00
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El tiempo de espera medio para recibir ayuda en los centros municipales de servicios sociales del Ajuntament de Palma se redujo un 54,1% en 2011, respecto a 2010. En concreto, el año pasado la media anual era de 14,39 días; mientras que en 2010 ascendía a 31,35 días. De este modo, la media anual de personas en lista de espera se redujo un 37%, ya que se pasó de 523 personas en 2010 a 330 en 2011. La teniente de alcalde de Benestar Social, Sandra Fernández, explicó que la reducción del tiempo de espera ha sido posible gracias a la implicación de los trabajadores y funcionarios de servicios sociales, que han asumido más trabajo voluntariamente. Además, señaló que han «optimizado y reorganizado el área», para prestar un mejor servicio.

El número de personas que solicitaron ayudas en los centros municipales de servicios sociales se mantuvo estable; exactamente 25.183 personas, 235 menos que en 2010. Fernández explicó que el boom de demandas se produjo en 2010, mientras que el año pasado la mayoría eran casos cronificados.

Más beneficiaros

Cabe destacar que el año pasado las ayudas de los centros municipales de servicios sociales llegaron a más personas. En concreto, se beneficiaron 3.516 personas frente a las 3.146 de 2010. Sin embargo, el número total de ayudas concedidas fue inferior en 2011, cuando se autorizaron 5.981, frente a las 6.633 del año anterior. El director general de Benestar Social, Guillermo Sánchez, aclaró que cada persona puede recibir más de una ayuda. Además, puntualizó que en ambos ejercicios se destinó la misma cuantía a estas ayudas, unos 3 millones de euros.

Las ayudas que más se han autorizado son las correspondientes a la cobertura de necesidades básicas (principalmente comida); en 2011 se concedieron un total de 1.069, tres menos que el ejercicio anterior. Le siguen en número las ayudas destinadas a la cobertura de gastos de vivienda (pagos de alquiler, de hipotecas, etc.); exactamente fueron 993, frente a las 1.062 del año 2010.

Por sexo, las mujeres toman más la iniciativa a la hora de solicitar ayudas que los hombres, por lo que también se les conceden más que a estos. Así, de las 24.948 personas atendidas el año pasado, 13.348 fueron féminas.