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El PI (Proposta per les Illes) ha señalado que 25 -de los 35 ayuntamientos de Baleares en los que se ha votado la retirada del decreto ley de Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL)- han aprobado que esta normativa, que ha sido el factor determinante para una huelga indefinida de docentes, no prospere.

Según explica la formación en un comunicado, el PI ha presentado esta moción de retirada del decreto de trilingüismo en los 28 municipios en los que tiene representación.

En opinión del presidente de el PI, Jaume Font, «la falta de consenso y medios, y el ataque que supone para la lengua propia» el TIL «pedían una respuesta política contundente y comprometida».

Las mociones, explica el PI, se han presentado en junio, julio, agosto y septiembre, y el próximo miércoles será debatido también en el Ayuntamiento de Es Mercadal (Menorca).

El PI destaca que en diez municipios de Baleares «esta moción ha prosperado gracias a que concejales del PP se han desmarcado de la línea oficial del Govern», en algunos casos «mediante abstenciones y en otras votando a favor».

Los municipios de Sa Pobla (donde gobierna el PP), Consell (PSOE-PSM-PI) y Banyalbufar (PI) aprobaron la moción contra el TIL por unanimidad, en Lloret de Vistalegre (mayoría absoluta del PP), la abstención de uno de sus concejales permitió que se aprobara la propuesta, precisa el PI.

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En Llubí se abstuvieron los cinco regidores del PP que gobiernan en minoría y en Pollença también se registraron cinco abstenciones, mientras que en Lloseta (mayoría absoluta del PSOE) se dieron dos abstenciones del Partido Popular.

En el municipio de Búger (PP con soporte del PI) se presentaron dos abstenciones que permitieron sacar adelante la moción, el mismo número que en Sineu (PP-PI).

Según el análisis de la formación política, estos datos dejan claro que «la comunidad educativa no está sola en esta lucha», ya que «los gritos contra el Tratamiento Integrado de Lenguas no son de una minoría como quiere hacer ver el Govern».

«Por primera vez, los sindicatos educativos, asociaciones de padres y madres, inspectores y concejales de todos los partidos políticos, se han unido en un clamor: la retirada de un proyecto educativo», precisa el PI.

Por esta razón, pide «una vez más, cordura y responsabilidad al ejecutivo (autonómico), que debería dedicar sus esfuerzos a encontrar nuevas vías de diálogo y consenso». «El Govern de las Islas Baleares es el Govern de todos los ciudadanos y todos merecen ser escuchados», insiste el PI.

Además, explica que su posición es favorable a la implantación de una tercera lengua pero propone que se haga de manera progresiva, con la implicación de la comunidad educativa y sin rebajar las horas de catalán establecidas en el decreto de mínimos