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Las Balears, que eran la única comunidad que carecía de una ley de pesca autonómica, ya disponen a partir de esta semana de una norma que regula la actividad del sector, desde la extracción hasta la comercialización.

El pleno del Parlament ha aprobado el proyecto de ley de Pesca Marítima, Marisqueo y Acuicultura, redactado por la Conselleria d'Agricultura i Medi Ambient del Govern. Más de la mitad de los 146 artículos han obtenido el acuerdo de los diputados de todos los grupos políticos. Durante el trámite de ponencia y comisión, el PP incorporó 20 enmiendas de la oposición.

Entre las novedades que aporta, el conseller Gabriel Company destaca la creación de Red Balear de Áreas Marinas Protegidas «como instrumento de coordinación para fomentar la actividad pesquera sostenible».

Oceana ha valorado de forma positiva esta red «al representar una mejora en la gestión de la pesca y la conservación de los ecosistemas marinos», pero esta entidad reclama «medidas más valientes».

El conseller manifiesta que «es una ley muy consensuada, fruto del acuerdo con el sector, tras numerosas reuniones con las cofradías de pescadores y la entidades del sector, cuyas aportaciones hemos tenido en cuenta». Company anuncia que «abre la puerta para complementar la extracción con el turismo pesquero, que constituye una reivindicación del sector». Según el conseller, «diversifica la economía pesquera balear, revaloriza los aspectos positivos de la actividad y potencia el consumo del pescado local».

La coordinadora de la ponencia parlamentaria la ley, Asunción Pons, «surge de la necesidad de regular la actividad pesquera en Balears, hasta ahora olvidada por la legislación autonómica». Subraya que «clarifica, de una vez por todas, el marco competencial en materia de Pesca entre el Govern y los consells insulars, y permitirá acabar con la situación actual en la que no actúa ninguna de las dos administraciones y quienes sufren esta falta de gestión son los pescadores».

La Ley de Pesca, además de ordenar la actividad de los pescadores profesionales de Balears, también regula la pesca marítima recreativa, que cuenta con más de 50.000 licencias en vigor.; y establece un nuevo régimen sancionador.

Los grupos de la oposición han calificado de «poco ambiciosa y centralizadora» esta ley, pero la diputada Asunción Pons declara que «los Consells insulars han sido consultados y han participado en la redacción de una ley que permite ejercer, por primera vez, de formada ordenada, las competencias de Pesca a Govern y consells, con la elaboración de los planes de gestión insulares».