Una farmacéutica busca un producto que le ha solicitado un cliente. | C. Roig

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El Servei de Salut de les Illes Balears ha devuelto desde julio de 2012 un total de 3.035.623 euros como excedente a pensionistas de Balears, según datos de la Administración autonómica.

La irrupción del copago farmacéutico supuso que los pensionistas, que hasta entonces no debían abonar nada por su medicamentos, paguen una parte. Cuando supera los 18 de euros al mes, el Ib-Salud devuelve la cantidad excedentaria.

El exconseller de Salut Vicenç Thomàs, actual portavoz adjunto del PSIB, dice tener constancia de que muchos pensionistas de Balears no compran medicamentos por no tener liquidez para abonar las cantidades.

Según una serie de respuestas al Parlament del conseller Martí Sansaloni, el IB-Salut ha cobrado en este periodo 4.370.384 euros de recetas de pensionistas.

Una media de 31.600 personas tienen derecho en Balears a que se les reintegre una parte de sus gastos farmacéuticos. Las cantidades se ingresan en las cuentas bancarias en las que se percibe la pensión.

Una idea del PP

El 'copago' se impuso con el gobierno del PP. El nuevo modelo de aportación farmacéutica del Sistema Nacional de Salud empezó a aplicarse el 1 de julio de 2012 con el «objetivo de garantizar la sostenibilidad y la continuidad del sistema sanitario estableciendo mecanismos que aseguren que los pacientes sólo retiran los fármacos que realmente necesitan».

La normativa establece los porcentajes de aportación según el nivel de renta. Respecto a los usuarios que son pensionistas, los que tienen una renta inferior a 18.000 euros anuales asumen el 10 % del coste de los fármacos, pero con un límite máximo de 8 euros al mes. Los que cobran entre 18.000 y 100.000 euros asumen el 10 %, pero con un máximo de 18 euros al mes, y los que tienen una renta superior a 100.000 euros deben hacerse cargo del 60 %, con un máximo de 60 euros al mes.