La mayoría de embarcaciones en Calanova solían ser de pequeño tamaño. | Redacción Digital

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El Govern aprobó una remodelación de los amarres del puerto de Calanova muy favorable a la concesionaria pocos meses después de que se resolviera el concurso que ahora investiga la Fiscalía Anticorrupción.

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La modificación incorporaba 28 amarres para embarcaciones de hasta 20 metros de eslora y seis para barcos de hasta 25 metros, mucho más rentable para el concesionario que la configuración anterior del puerto. La incorporación de este tipo de plazas era la que permitió a la empresa Port Olímpic Calanova S.L. hacer una oferta económica muy superior a la de sus competidores. A esta mercantil estaba vinculado Carlos Gelabert, actual socio de despacho del entonces conseller de Turisme, Carlos Delgado.

Este es uno de los puntos controvertidos que investigan la Fiscalía y la Guardia Civil y que está también pendiente de que resuelva un juzgado de lo Contencioso, después del recurso presentado por una de las empresas que perdió el concurso, Curva Sport S.L.