Las enfermedades del sistema circulatorio fueron la principal causa de la muerte en 2015. | Redacción Digital

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La tasa bruta de mortalidad en Baleares se situó en 736,6 decesos por cada 100.000 habitantes durante 2015, y las enfermedades del sistema circulatorio fueron la principal causa de la muerte, con 214 por cada 100.000 habitantes.

Los datos recogidos en la encuesta «Defunciones según la causa de muerte», difundida este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), reflejan que la tasa de las defunciones debidas a tumores fue de 194,6, mientras que la tasa de decesos por dolencias relacionadas con el sistema respiratorio estuvo en 82,1.

También en lo que hace referencia a Baleares, la tasa de decesos causado por enfermedades del sistema nervioso fue de 47,2, y la decesos por trastornos mentales y del comportamiento de 28,6.

En cuanto a las tasa estandarizada -que representa la mortalidad si todas las comunidades tuvieran la misma composición por edad-, en Baleares se situó en 900,3.

En el conjunto de Españ, la encuesta refleja que las muertes por suicidio descendieron en 2015 hasta los 3.602 fallecidos, un 7,9 % menos que el año anterior, pero todavía duplican el número de decesos por accidente de tráfico, que crecieron un 0,4 por ciento hasta sumar 1.880.

En total, en 2015, 15.079 personas fallecieron por causas externas -suicidio, caídas accidentales, ahogamiento y accidentes de tráfico-, que tras un incremento del 1,2 %, registró la cifra más alta desde 2008.

Las caídas accidentales se cobraron 2.783 vidas y el ahogamiento, con un aumento del 12,7 %, provocó 2.672 fallecidos.

El año 2015 cerró con la muerte de 422.568 personas, un 6,8 % más que un año antes, una cifra que pulverizó la serie histórica del INE que data de 1980 y que se explica por el progresivo envejecimiento de la población.

Es decir, que murieron 910 personas de cada 100.000 habitantes.

Así, la mayoría de las defunciones (407.489, el 96,4 % del total) se debieron a causas naturales (enfermedades), tras un aumento del 7 %.

Entre las causas de muerte, las enfermedades del sistema circulatorio mantienen el primer puesto con 124.197 fallecidos (29,4 % del total), seguidas por los tumores, que crecen un 1 % hasta alcanzar los 111.381 muertos, y las enfermedades del sistema respiratorio, con 51.848 difuntos.

El INE destaca el aumento de fallecidos en los principales motivos de defunción, especialmente en las enfermedades del sistema respiratorio, que aumentan su mortalidad un 18,3 % respecto al año anterior.

Por sexos, los tumores son la primera causa de muerte para los hombres (297 fallecidos por cada 100.000) y la segunda en mujeres (184,9).

Y las enfermedades del sistema circulatorio repiten como primera causa de fallecimiento para ellas (286,9) y la segunda para los varones (247,6).

En cuanto a la edad, el principal motivo de defunción para los menores de un año fueron las afecciones perinatales y las malformaciones congénitas (79,7 % del total de fallecidos de este grupo).

Los tumores fueron la primera causa para los grupos de edad de 1 a 14 años y los de 40 a 79 años, con un 29,4 % y un 43,1 % de su total, respectivamente.

De entre 15 y 39 años, un mayor porcentaje falleció debido a causas externas (38,5 %), mientras que la mayoría de muertes de los mayores de 79 años fueron causadas por enfermedades del sistema circulatorio (33,9 %).

Si se detallan los datos, las enfermedades circulatorias que provocaron un mayor número de muertes fueron las isquémicas del corazón (infarto, angina de pecho) y las cerebrovasculares, que aumentaron un 3,7 % y un 3,1 % respectivamente.

Entre los tumores, el más mortal volvió a ser el cáncer de bronquios y pulmón, que aumentó un 1,6 % y ocasionó 21.596 fallecidos, seguido por el de colon, que disminuyó su mortalidad un 2,3 %.

Para las mujeres, el más mortífero fue el de mama, que provocó 6.235 fallecidas (además de 75 hombres), con un alza del 0,1 %.

Entre las causas de muerte más frecuentes, el principal incremento respecto a 2014 se dio en la neumonía, que creció un 20 % para los varones y un 21,8 % para las mujeres, y la demencia (incluye la vascular y la senil pero no las enfermedades del sistema nervioso como el Alzheimer), que subió más de un 14 %.

Por comunidades autónomas, las tasas brutas de mortalidad más elevadas corresponden al Principado de Asturias (1.297,8 decesos por cada 100.000 habitantes), Castilla y León (1.189) y Galicia (1.162,8), mientras que las más bajas se sitúan en las ciudades autónomas de Ceuta (596,6) y Melilla (609,4), Canarias (710,1) y la Comunidad de Madrid (732).

Sin embargo, en cuanto a las tasas estandarizadas -que representan la mortalidad si todas las comunidades tuvieran la misma composición por edad-, es la de Melilla la más alta (1.083,1), seguida por Andalucía (1.003,1), Ceuta (970,8) y la Región de Murcia (944,6).