Los taxis, realizando una de sus paradas turísticas frente a la Catedral. | M. À. Cañellas

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Los taxistas están indignados por la prohibición de estacionar en la explanada de la Seu. Desde que los vecinos de la zona se quejaron de que los taxis pudieran aparcar en la plazoleta frente al Palau Episcopal, los conductores del servicio Taxi Tour temen las multas de la Policía Local de Palma que patrullan las calles.

Una taxista, que prefiere no identificarse, afirmaba este sábado que «no aparcábamos en la explanada buscando clientes, sino que hacíamos una parada larga, de unos 20 minutos, en la calle Mirador, para que los turistas pudieran disfrutar de la zona de la Catedral sin prisas».

Mientras narraba su versión, los turistas habían bajado del taxi para hacer fotografías de la bahía de Palma y la conductora no dejaba de mirar nerviosa a su espalda sin quitarles los ojos de encima. «Ahora no podemos hacer más de dos minutos de parada, tememos la multa», explicaba la conductora. El colectivo se queja de que los turistas, en su mayoría cruceristas, no están tan cómodos con el Taxi Tour ya que no les permite disfrutar con tranquilidad de una de las imágenes más emblemáticas de Palma.