TW
0

La coportavoz de MÉS per Mallorca Bel Busquets ha alabado la intervención de la presidenta Francina Armengol en el debate sobre el estado de la comunidad porque considera que ha manifestado un elevado nivel de «autoexigencia» y de «voluntad de hacer más».

Busquets considera que el discurso con el que Armengol ha abierto el debate de la comunidad «marca un Govern que consolida las políticas de izquierdas y apuesta por la continuidad y el rigor del trabajo hecho y en ahondar en la autoexigencia», ha declarado en los pasillos del Parlament.

Ha recalcado que Armengol «no ha caído en la autocomplaciencia sino que ha sido un discurso autoexigente», en el que ha realizado «una revisión de todo lo hecho pero con la voluntad de hacer más y seguir trabajando para que las islas sean un mejor lugar para vivir».

«Vemos un Govern que es heredero de las luchas sociales contra el Govern Bauzá, que marcaron el terreno en Servicios Sociales, Sanidad y Educación y que apuesta por unas mejoras sociales que quiere consolidar», ha dicho Busquets.

Frente a la huella del Govern Bauzá

Considera que «no se pude dar ningún paso atrás», y que es necesaria «una mejora de las infraestructuras, la grandes olvidadas del Govern Bauzá junto con las personas», algo que la presidenta ha dejado patente al explicar la apuesta del ejecutivo por más escuelas, hospitales, infraestructuras socio-sanitarias y residencias.

Busquets ha señalado que una muestra de dicha consolidación de las políticas de izquierdas por parte del Govern es tanto el trabajo por mejorar las condiciones laborales de los trabajadores como «la apuesta firme de apoyo a empresas, industria, autónomos y cooperativas, que serán las generadoras de prosperidad compartida y también una apuesta clara por la innovación como 'leitmotiv' que ligue todas las políticas económicas».

Ha destacado además la referencia de Armengol a las políticas de vivienda que emprenderá el Govern, por ser «uno de los graves problemas que sufren las islas». En el ámbito económico, ha destacado las deducciones fiscales anunciadas por la presidenta, porque «van directamente a los bolsillos de las familias».

Según la coportavoz de MÉS per Mallorca, socio del PSIB en el Govern, las políticas definidas por Armengol se han trazado «sin olvidar que las islas están en situación de infrafinanciación», que están cumpliendo con los deberes que marca el Estado y que «exigirán también que el Estado cumpla con las islas».

Valió la pena

Por su parte, desde MÉS per Menorca, su portavoz Nel Martí ha asegurado que «ha valido la pena, a pesar de las discrepancias, apostar por este Govern de cambio».

Martí ha afirmado que el balance una vez pasado el ecuador de la legislatura es satisfactorio para Menorca. «Creemos que se han hecho muchas cosas, pero también que todavía queda mucho por hacer», ha manifestado.

A juicio del diputado menorquinista, «posiblemente queda más por hacer que lo que se haya podido conseguir en estos dos años», pero la transformación que persigue el Govern de coalición «necesita más tiempo».

«Necesitamos cuatro años más después de esta legislatura», ha aseverado Martí, que ha enumerado logros para Menorca como el traspaso de la promoción turística, «una reivindicación histórica», la residencia para enfermos y familiares desplazados y el centro Bit.

Ha incidido en que «este Govern es sensible a la realidad de cada una de las islas» y ha puesto como ejemplo de esta consideración la decisión de congelar la ecotasa en temporada baja, como había solicitado al Govern el Consell de Menorca.