«En las Islas Baleares el problema no es el adoctrinamiento, tenemos problemas más importantes», ha considerado el conseller. | Teresa Ayuga

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El conseller de Educación y Universidad, Martí March, ha asegurado que, «a día de hoy, en la Conselleria d'Educació y en la Inspección Educativa no hay ninguna queja ni ninguna denuncia» por adoctrinamiento político en los colegios.

«Se está extendiendo una duda total sobre toda la comunidad educativa» por intereses partidistas que es «irresponsable», ha criticado March, que ha atribuido esta conducta a políticos baleares y también a dirigentes estatales de Ciudadanos y el PP que «están politizando la educación como nunca».

Para el conseller, estos políticos aprovechan el debate sobre las demandas independentistas del nacionalismo catalán para cuestionar la educación pública. «Vamos por mal camino», ha lamentado.

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Según March, cuando en algún medio de comunicación se ha denunciado un supuesto caso de adoctrinamiento la inspección educativa ha evaluado los hechos y elaborado un informe y lo ha puesto a disposición de la Fiscalía de Menores.

«En las Islas Baleares el problema no es el adoctrinamiento, tenemos problemas más importantes», que son los que denuncian los docentes, como las elevadas ratios de alumnos por aula, la falta de recursos y la necesidad de mejorar la Formación Profesional, ha asegurado el conseller.

March ha hecho estas manifestaciones en el pleno del Parlament ante una pregunta de la diputada de El Pi Maria Antònia Sureda, quien le ha «datos objetivos» ante unas denuncias «que provocan un grave perjuicio» a todo el colectivo docente.