«Con esta nueva marca vamos a revolucionar el mercado hotelero con un nuevo tipo de servicio y oferta. Se trata de un concepto único que se podrá extrapolar a otros destinos vacacionales. El quedarnos con el Me Cancún, que Meliá deja por cuestiones operativas pese a ser un establecimiento emblemático, nos permitirá afrontar este nuevo reto y poder diversificar nuestro producto hotelero en otros mercados turísticos en los que vamos a operar con esta marca», afirma.
El hotel es propiedad de Armar Capital, cuyo principal accionista es el inversor mexicano Daniel Araf. En estos momentos se está reformando y se invertirán 60 millones de dólares (50,2 millones de euros) para convertirlo en el mejor hotel de Cancún.
El establecimiento, de cinco estrellas, albergará 667 habitaciones, 11 puntos de venta de alimentación y bebidas y se ofertará como un hotel ‘beach club' de fin de semana. Contará con un claro contenido musical latinoamericano.
Blanco explica que el nuevo hotel «tendrá habitaciones de 100, 200 y 400 metros cuadrados, que contarán con una discoteca propia de uso personal. Lo vamos a operar en asociación con el propietario y será un punto de inflexión en Cancún».
1 comentario
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MEJOR INVERTIR FUERA QUE EN BALEARES. AQUI MAS DE LO MISMO TURISMO DE ALPARGATA TODO INCLUIDO Y NUESTROS POLITICUCHOS PROHIBIENDOLO TODO COBRANDO ECOTASAS ABUSIVAS, SIN RESOLVER LOS PROBLEMAS DE MASIFICACION Y TENIENDO LAS INFRAESTRUCTURAS OBSOLETAS CON MUY MALA PLANIFICACION ETC ETC ETC