Imagen del edificio de Gesa. | MIQUEL ANGEL CAÑELLAS¶

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El Ayuntamiento de Palma ha realizado este martes la entrega formal a Endesa Distribución Eléctrica de las llaves del edificio de Gesa, en cumplimiento de una sentencia que anuló la modificación urbanística que reparceló el solar en el que está ubicado y otros dos anexos.

Los técnicos del área de Urbanismo y personal de Endesa han realizado la mañana de este martes una visita al edificio con la finalidad de llevar a cabo un informe sobre el estado del inmueble y documentarlo, así como para coordinar algunos aspectos relacionados con su funcionamiento como los suministros de agua y luz, y la alarma, ha informado el consistorio en un comunicado.

La entrega de llaves se ha producido después de que una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Baleares anulada en marzo de 2017 la modificación puntual realizada en 2009 del Plan General de Ordenación Urbana de Palma (PGOU) sobre el sector Llevant y Fachada Marítima.

Cort ratificó esa anulación en un acuerdo el pasado junio, en el que la junta de gobierno aprobó también poner a disposición de Endesa las tres fincas registrales de las que era titular antes de la reparcelación.

El consistorio ha recordado que actualmente no se puede conceder ninguna licencia en esta zona, porque está afectada por una suspensión de un año para poder redactar una nueva modificación del Plan General.

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Esta modificación, que sustituirá a la anulada por la sentencia del TSJIB, la están redactando técnicos del área de Modelo de Ciudad, Urbanismo y Vivienda Digna y se prevé tenerla lista antes del final de este 2018.

El TSJIB declaró nula la modificación del PGOU de Palma de 2009 que supuso que la Fachada Marítima perdiera el uso residencial y pasara a ser equipamiento comunitario y espacio libre para mantener el edificio de Gesa, que había sido declarado Bien Catalogado en 2007.

El tribunal consideró «del todo insuficiente» y desajustado el estudio económico con el que el consistorio valoró el coste de la operación, en la que los terrenos privados de primera línea del frente marítimo se reubicaron en dos ámbitos: uno de ellos en la sede de Emaya de la calle Joan Maragall y el otro situado al este del barrio de Llevant.

La sala concluyó además que el Ayuntamiento de Palma aplicó un coeficiente de ponderación incorrecto para calcular la equivalencia de los terrenos de primera línea con los de segunda y tercera donde se reubicó el aprovechamiento para uso residencial.

Una constructora compró los terrenos de más de 27.000 metros cuadrados a Endesa en 2005, pero la compañía recuperó su titularidad en 2014