Grupos ecologistas alertaron en su momento del uso de material tóxico en la obra de la autopista a Llucmajor. | Curro Viera

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La Comissió de Medi Ambient de les Illes Balears considera adecuado, a priori, el uso de escorias en la autopista de Llucmajor a Campos. Su presidente, Antoni Alorda, explicó que solicitará informes a varios departamentos para asegurarse de que el uso de este material es correcto y que no se vulnera la legalidad, pero también indicó que las explicaciones que el conseller insular de Mobilitat, Iván Sevillano, le ha trasladado sobre el asunto, le habían parecido «razonables».

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La Comissió de Medi Ambient recibió a finales de agosto una denuncia de las entidades ecologistas advirtiendo de que el uso de escorias en la construcción de la autopista era irregular. Alorda aseguró que la denuncia la Comissió contrastada técnicamente y que por ello se han pedido explicaciones al Consell de Mallorca, que es el promotor de las obras, y que solicitarán informes a Tirme (la empresa que las suministra), a la Direcció Insular de Residus y a la Direcció General de Recursos Hídrics. Alorda descartó asimismo que se revise la evaluación de impacto ambiental a raíz de las escorias.

El conseller Sevillano indicó que actualmente, de acuerdo con el plan de ejecución de las obras, no se están vertiendo escorias. Dijo que sí se utilizaron, hace un par o tres de meses, al construir los viales de servicio, y que se volverán a usar cuando sea preciso.