La ‘Tirumala limniace’ es conocida como el tigre azul. Las publicaciones científicas ya se han hecho eco de que esta especie ha sido observada por primera vez en Europa, concretamente en Mallorca. Se ignoran las circunstancias de su llegada.

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La primera cita en Europa de la mariposa llamada tigre azul (Tirumala limniace) se ha registrado este año en Mallorca, concretamente en Santa Eugènia, cuando una vecina de este municipio encontró en su casa el cadáver de un ejemplar y le recordó individuos que había visto durante un viaje a la India.

Samuel Pinya, profesor de Biología e investigador principal del Grupo de Ecología Interdisciplinaria de la UIB, explicó que «resulta difícil saber cómo esta mariposa ha llegado a Mallorca, lo que es bastante extraño, aunque podríamos manejar tres hipótesis: por el transporte de mercancías o una carga de plantas vivas, que se haya escapado de una colección particular o por la moda reciente de la suelta de mariposas en bodas y otros eventos sociales».

Las dos primeras hipótesis son más o menos frecuentes a la hora de explicar la presencia de especies invasoras o exóticas en las Islas, pero la tercera empieza a preocupar a los científicos, pues se realizan sin ningún control al no haber ninguna normativa al respecto.
Pinya señala que «la detección de esta mariposa en Mallorca es fruto de una auténtica lotería. La vecina de Santa Eugènia mostró interés por el ejemplar muerto porque había visto mariposas de este tipo en la India. Si hubiera sido otra persona, tal vez la habría tirado directamente a la basura».

El investigador indica que «hay empresas dedicadas a la organización de bodas y eventos sociales que, entre sus servicios, ofrecen la suelta de mariposas, aunque puede ser una petición expresa del cliente. Hay un código de buenas prácticas que recomienda que la suelta sea de ejemplares autóctonos o de únicamente machos, para evitar su reproducción. Sin embargo, no dejan de ser consejos. No hay normativa legal y al final cada uno hace lo que quiere».

Samuel Pinya recuerda la llegada de especies invasoras de mariposas, como la del garballó, la de los geranios y la de los boixos: «La mariposa del garballó llegó a Baleares en 2001; la de los geranios llegó a Europa en 1978 a través de una maceta procedente de Sudáfrica y se extendió rápidamente por todo el continente; y la de los boixos fue registrada por primera vez en Europa en 2006, siendo detectada recientemente en Balears, en 2017».

Según Pinya, «estas mariposas no compiten con las autóctonas y no se observa una incidencia directa sobre nuestras poblaciones, pero sí provocan graves daños en especies vegetales».

Concretamente, el primer caso de oruga del boix fue detectado en Alaró, inicialmente en una zona ajardinada y posteriormente en arbustos silvestres. Es una especie invasora muy agresiva y voraz que desde 2014 afecta gravemente a los arbustos del norte de Cataluña. El pasado mes de abril, esta oruga fue localizada en diferentes zonas verdes de Palma.