Estos días vemos cómo miles de jóvenes se desmadran completamente en sus comportamientos, creando una profunda crisis en la política sanitaria y en la imagen exterior del Archipiélago. Toda la prensa del país dedicó el fin de semana a hablar de Mallorca, aunque no precisamente con elogios. Conociendo esto, este sábado por la noche, miles de chavales se concentraron en el Polígono de Son Castelló, en un macrobotellón absolutamente ilegal. Este periódico publicó que la Policía Local, conocedora de la reunión, dijo que no acudiría para evitar enfrentamientos y tensiones.
Si como resultado de esta inhibición se produjera un aumento de los casos de coronavirus, si perdiéramos la modesta normalización de la actividad turística que podría tener lugar en julio, ¿quién responde de esta inhibición policial?
Esta semana, una noticia de prensa decía que uno o varios delincuentes robaron una bicicleta eléctrica, valorada en 3.500 euros, propiedad de la Policía Local de Palma, de delante de la comisaría del distrito Centro. El hecho carece de interés salvo por su tremendo simbolismo: nuestras autoridades han perdido de tal manera su capacidad de mando, que los delincuentes roban a la propia policía en su sede. Una vez comprobada la sustracción, me imagino al policía preguntándose si valía la pena denunciarlo, sabedor de la impotencia con la que opera el cuerpo al que pertenece. Para el resto de los ciudadanos, la pregunta que emerge es con qué actitud puede uno ir a interponer una denuncia cuando ni ellos mismos son capaces de protegerse.
La cuestión es mucho más grave cuando se observa que históricamente ha habido incontables indicios de connivencia entre la propia policía y empresarios desaprensivos, dispuestos a hacerse con el control del mercado del ocio nocturno. Los procesos penales han destapado situaciones totalmente bochornosas, impropias de una democracia en la que la policía cumple su función de proteger a aquellos a quienes ampara la ley.
Uno de los servicios públicos fundamentales en cualquier democracia es la protección policial. Desgraciadamente, en la sociedad siempre hay quien incumple con las normas elementales de convivencia, por lo que es fundamental este amparo. Lo es ante el engaño de los trileros, ante quienes roban bicicletas, pero también lo es ante quienes incumplen las normas contra el coronavirus y nos condenan a la enfermedad o a la pérdida del turismo.
Los demagogos siempre dirán que la policía es represión y eso es deplorable. Sin embargo, la ley se ha diseñado para proteger a los débiles, para garantizarles un marco de convivencia seguro. Cada vez que la policía se inhibe, no sabe o no contesta, está permitiendo que alguien se vea atropellado en sus derechos. Por ejemplo, en su derecho a que se luche contra el virus, a que tras los esfuerzos de estos meses podamos tener algo de turismo, a que podamos transitar libremente por los polígonos de Palma, a no tener que pagar cantidades exorbitantes por limpiar lo que otros destrozan.
Ciertamente, da vergüenza tener que recordar que en una democracia la ley es una herramienta para amparar a los débiles poniendo coto a los que abusan de su poder o que se amparan en el anonimato de la muchedumbre, y no un instrumento de represión y opresión.
Desgraciadamente, el resultado de lo que vemos es que Baleares es un territorio sin ley en el que paradójicamente los políticos dicen que somos «un lugar seguro». Si nos sinceramos, hemos de reconocer que nuestros chavales, los que vienen en viajes de estudios, las mafias de la economía informal que pululan en las zonas turísticas y una parte importante de los turistas que nos visitan están felices de que aquí no haya ley. Es lo que nos diferencia.
20 comentarios
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Mallorca es el salvaje Oeste, hay que proteger el negocio, la cosa nostra. Botellones, gente sin mascarilla por doquier, comercios de playa, hasta mis honorables vecinos, supuestamente instruidos en colegios de pago, deben de ser fans de Bosé. Bicis y patinetes por las aceras delante de las narices de la Local, va a tener razón el refranero y sus aforismos. Yo prefiero a Aute que a Bosé: retales, chapuza y pastiche ..
La policía Nacional local siempre me ha hecho reír por lo inútiles que son haciendo redadas a los vendedores ilegales , siempre me viene el recuerdo de Benny Hill. También me dan pena porque son unos borregos y simplemente hacen lo que los políticos y altos cargos les ordenan. Últimamente , desde que empezó la pandemia me dan rabia, me fastidian mi baño nocturno en la playa, para luego pasearse toda la noche por delante del botellón del balneario 6 sin actuar. Para terminar de enfadarme hace unos 10 días hicieron un control de ITV justo delante de botellones en el balneario 6 a las 19 de la tarde. Por poco mando a la mierda al señor policía, pero me acordé de que sólo es un borrego y le mandaron recaudar. Se supone que están para protegernos y sinceramente sólo sirven para regular el tráfico, poner multas de tráfico y fastidiar a los ciudadanos responsables por su ineptitud. Me cansé, iré a la playa de noche , haré botellón ( yo sólo) , iré indocumentado y me haré el turista. ;-)
Buen artículo.El problema esta en los políticos .... en consecuencia las leyes que les protegen y por tanto el sistema judicial.La pescadilla que se muerde la cola.Y corruptos impunes y andando por ahí a sus anchas yriendose de nosotros..Lo de Son Banya,la Soletat o la cañada real galiana lleva muchos años funcionando y da cuantiosos dividendos, sin IVA ,claro.
Completamente de acuerdo con el artículo. Mallorca en general, pero sobre todo Palma en particular. Se ha convertido en una ciudad abandonada a su suerte, en un estado de mantenimiento y conservación deplorable, a lo que ahora se añade una situación de descontrol total. En los bares que hay alrededor de mi casa, sin ir más lejos, cada noche es un festival, decenas de personas en la calle bebiendo y gritando, de lunes a domingo, y mucho más allá de las 2am. Al llamar a la policía ya te avisan que para estas cosas no acuden. Y es solo un ejemplo. La culpa no es de la policía, sino de quienes deben gestionarla. Tenemos un Ayuntamiento DÉBIL, un Alcalde DÉBIL, sin mando ni capacidad para gobernar. La ciudad sufre un deterioro físico y social que será difícil de revertir.
No es problema de la policia, es problema de los politicos que son los que mandan a la policia. Recuerdan los meses del confinamiento? La policia no pasaba ni una. Porque? La orden del politico era clara. Cuando el politico ordena de boquilla que entre la policia en viviendas derribando puertas y cuando se monta el lio, la denuncia, el politico dice que no sabe nada, entonces que puede hacer la policia? Cuando detienen a los trileros o cualquier otro delincuente lo llevan al juez y se va fe rositas en aplicacion de la ley, que puede hacer la poli? El problema son los politicos y sus leyes, ellos no tienen problemas: guardia civil a la puerta de sus casas, escoltas, etc
Este artículo debería ser publicado en toda la prensa nacional y presentado a modo de denuncia por la dejadez de este gobierno, tanto aquí como el Gobierno central. Mucho prohibir pero estamos totalmente desamparados ante la delincuencia y ante la justicia, inseguridad ciudadana con falta de policías, a los que se les manipula, les restan de poderes para el cumplimiento de la ley y a la vez, han conseguido que les falten al respeto. Somos una ciudad sin ley, una isla en decadencia y un país de pena por la "clase" política actual.
Errada llevar el toc de queda. A les 00.00 tothom a casa cony!, que ens anem a la merda tots! (menys els que cobren Erte, els funcionaris i els politics... aquets no.)
Buenísimo artículo!
Efectivamente, tal como comenta @MMMS, es un problema político, no policial. Los delicuentes actuales, no solo roban a los turistas, ahora se dedican a la política, empresarios que blanquean dinero impunemente y estafan a la gente, rodeandose del poder de abogados y policías corruptos. Si los políticos dejan que se hagan macrobotellones responde a la ecuación de "dejad que los jovenes se infecten y 1º dejara de haber reticencias a su vacunación, 2º Compraremos más vacunas 3º COMISIÓN PARA EL POLITICO DE TURNO que compra las vacunas
Por razones como éstas se crearon tanto la Ertzaintza como los Mossos d'Esquadra, porque la policía local era ineficaz.