Los doce encausados por desórdenes públicos supuestamente irrumpieron en la terraza de un restaurante del muelle lanzando confeti y proclamas contra el turismo, pero nueve de los procesados aseguraron en la primera sesión del juicio celebrado el lunes que no participaron. En total, las condenas propuestas por la Fiscalía suman hasta 29 años de prisión.
El policía ha explicado que cuando llegó al lugar de los hechos, tras recibir un aviso del 091, «no quedaba nada» porque la manifestación se había disuelto. Encontró a los dos policías de la Autoridad Portuaria, que fueron los primeros en llegar al restaurante y también han comparecido este martes como testigos. Uno de ellos, de hecho, también ha afirmado que no «percibió peligro».
Los agentes portuarios encontraron a un grupo de manifestantes que se disolvía, pero no apreciaron desperfectos ni en el restaurante ni en el muelle, aunque sí «gente nerviosa», tanto clientes como trabajadores. Aun así, ninguno quiso denunciar los hechos, según ha puntualizado. Según uno de los agentes, no encontraron ya restos de botes de humo ni bengalas y, aunque estos elementos hubieran sido usados en el acto, no era posible que cayeran sobre las embarcaciones amarradas en un pantalán anexo porque había una barrera de separación.
Contrariamente, un tripulante de un yate que presenció la protesta desde la embarcación amarrada ha dicho que un bote de humo ya extinto rodó hasta el pantalán y que un marinero del puerto lo recogió y lo tiró a la basura. Una camarera del restaurante ha asegurado que no cundió el pánico entre los clientes, aunque tuvieron que cambiarlos de mesa. El humo de las bengalas duró poco más de un minuto y los activistas que entraron en la terraza se fueron a los diez minutos, según ha dicho. Curiosamente, la testigo no recuerda que se lanzara confeti.
Otro empleado que ha intervenido en el juicio ha descrito el incidente como más traumático para los clientes, que estaban «asustados» mientras una decena de manifestantes llenaban de humo el espacio de la terraza, gritaban consignas y lanzaban confeti. En la misma línea, el propietario del local ha dicho que el grupo de manifestantes tendió una «emboscada» y que algunos clientes se marcharon. Al plantear el dueño que había sufrido perjuicios por la acción de Arran, que había obligado a cambiar platos por el confeti que arrojaron los manifestantes, la Policía decidió poner sus actuaciones en manos de un juzgado.
Identificación de los acusados
Estas actuaciones incluyeron la identificación de los sospechosos de participar en la movilización reivindicativa, que no se pudo hacer por las cámaras de vídeo porque no captaron imágenes útiles, por lo que se realizó por medio del vídeo que difundió Arran, los recuerdos de algunos de los testigos de la acción y una entrevista en un diario de dos dirigentes de la asociación juvenil. La Policía Nacional, según ha contado el agente, recopiló fotografías de personas que habían sido identificadas en el desalojo de una casa ocupa en Palma y de jóvenes habitualmente ligados a Arran.
El abogado que defiende a la mayoría de los procesados ha preguntado al policía si su unidad investiga delitos y organizaciones, a lo que el agente ha respondido: «Ambas cosas». «Hemos detenido a muchos de sus miembros en los últimos años porque han cometido bastantes delitos», ha argumentado en referencia a Arran. Aun así, el policía ha asegurado que no disponían de un listado con el nombre de miembros de la organización independentista.
14 comentarios
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TODOS sabemos lo que viene tras él confeti. Desde 1978 aguantando a imperialistas de PAISOS no sé qué
España: Valtonic axiliado, jovenes acusados de lanzar confeti, Zaplana en la calle, Pujol en la calle, Matas en la calle, Cursac a punto de salir libre,
Despues se quejan de que nos consideren un país de pandereta, juzgar a uno jovenes por lanzar confeti, no saben ni quienes eran, la mitad de los acusados no estaban. Habria que condenar a los policias que los acusan.
Lo unico que espero que se den cuenta que el millon de mallorquines no les apoyamos,, que no queremos violencia y que tuvimos suficiente con la Kale Borroca, que tanto defendia bildu el socio de PSOE y Sanchez , a mes las ideas se defiende no se imponen,,,,
Esto se pensaba que se podian saltar la ley sin ningun probema me gustaria saber la opinion de la Sra Armengol de podemos y mes de esta actuación,,,, pues son los que estan en gobierno.....
Puede que físico no, pero el mal ya está hecho. Menuda propaganda nos hacen esos radicales independentistas catalanes, pero como son de la cuerda de Armengol no pasa nada.
¿De los cristales rotos y las bengalas no se dice nada? Estos independentistas brazo GOB más radical deberían ser condenados y a limpiar playas. Asi aprenden que es trabajar y dejan de vivir del cuento de Puigdemon.
En cuanto a la peligrosidad, todo depende del color del cristal con que se mire: "No és lo mateix lo que pensa s'ase, lo que pensa es traginé y lo que pensa l'amo de s'ase". Pónganse en situación: Los clientes debieron pensar que empezaban unos raptos o unas hostilidades bélicas (cosas que volaban, peligrosas y prohibidas antorchas encendidas, gritos, consignas, pancartas, etc.) y todo ello con personas que deambulaban entre las mesas increpando a los turistas. Los responsables y trabajadores de los locales afectados: que desmontan el local, no podre trabajar y me voy al paro. El dueño del asno, que no me maten el pollino que es de lo que vivo. Afortunadamente no hubo ningún infarto. Gracias a estos espectáculos dantescos, cual fin del mundo, que nos demuestran que no precisamos de nadie para que nos vengan a defender del turismo. Que nos bastamos solos y que los problemas de Cataluña son sus problemas y no tenemos que admitir sus inexistentes países ni su lengua.
I a l'inrevés: si els independentistes són les víctimes de la policia, llavors les bales de goma són confetti, les pedrades són crits i les agressions, carícies.
És que si són independentistes, el confetti són còctels molotov, els crits són pedrades i les carícies, agressions.