Movilidad e Infraestructuras ha sacado a licitación las obras de mejora y ejecución de un nuevo carril bici de 4,5 kilómetros en la carretera Ses Salines-Colònia de Sant Jordi. En una nota de prensa, el conseller de Movilidad e Infraestructuras, Iván Sevillano, ha explicado que «este proyecto, que se pedía desde hace más de 15 años, era primordial porque se trata de una infraestructura que se ha quedado obsoleta desde el punto de vista de la seguridad vial».
Según Sevillano, «en los últimos años ha habido muchos accidentes y ahora, con esta actuación, lo que queremos hacer es resolver todos los problemas de accidentalidad, pero no sólo haremos esto, sino que aprovecharemos para impulsar la movilidad sostenible ejecutando un nuevo carril bici de más de 4,5 kilómetros, que se convertirá en uno de los más largos de toda la isla». Por su parte, la presidenta Cladera ha afirmado que «es un proyecto muy esperado, muy reivindicado y muy necesario y por eso celebran que hoy ya podemos dar la noticia de que la mejora de la carretera será pronto una realidad». «Invertiremos casi seis millones de euros en un proyecto integral, que mejorará toda la vía, que será más segura para todos, conductores, ciclistas y peatones», ha asegurado.
En esta carretera, que se utiliza para los trayectos de acceso a la población de la Colònia de Sant Jordi y Ses Salines, se ha apreciado un considerable aumento del tráfico en los últimos años. Además, el también aumento progresivo de la demanda ciclista en la zona, hace de este tramo un lugar peligroso al combinar gran número de bicicletas con una configuración de plataforma vial sin arcenes. Por este motivo, el Consell ha considerado «necesario» una actuación para conseguir restablecer las condiciones de seguridad vial y comodidad de los usuarios de la carretera, mediante la modificación del trazado en dos curvas y perfil longitudinal en dos tramos.
También está prevista una pequeña ampliación por la parte derecha sentido Colonia de Sant Jordi, para dotar de un carril bici y peatonal, separado de la calzada con una barrera de seguridad de madera. Se hará por el lado derecho para minimizar las afectaciones en las fincas y accesos. Así, las intervenciones de adecuación de la carretera Ma-6100 contemplan un refuerzo de firme completo, la dotación de un carril bici, la mejora puntual de dos curvas para dotarlas de mayor seguridad, la mejora de rasante en otros dos lugares para favorecer la visibilidad y la adecuación de arcenes y cunetas, entre otros aspectos.
El conseller Sevillano ha explicado que «ya los hemos hecho en otras ocasiones desde tareas de mantenimiento, pero como aspecto pionero en un proyecto de carreteras en toda la historia del Consell, se llevarán a cabo utilizando la técnica tradicional de la 'pedra en sec'». «Por esta tarea, hemos incluido en los pliegos técnicos la obligatoriedad de que el contratista que ejecute la obra, deberá contar para la disposición de los muros con un 'marger' debidamente acreditado en el conocimiento y uso de la técnica», ha anunciado. Sevillano ha añadido que «de esta forma, queremos asegurar el reconocimiento del oficio, y el fomento y el uso de la Técnica Tradicional de la 'Pedra en Sec'».
El Departamento de Movilidad e Infraestructuras ha estado en los últimos meses modificando el proyecto para actualizar los precios del mismo debido al aumento del coste de los materiales sufrido en el último año, a los efectos que no quede desierto. Debido a esto, el presupuesto total ha ascendido hasta alcanzar los 5.845.672 euros. El plazo de presentación de ofertas termina a finales del próximo mes y a partir de ese momento se empezará con el proceso de adjudicación. Si todo va con normalidad, se estaría en disposición de empezar las obras a principios de 2023. La duración estimada de las obras es de nueve meses.
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