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La ocupación hotelera media en Mallorca en lo que llevamos de temporada de verano, caso de junio, va por debajo de los registros alcanzados en 2022 y 2019. Así, los niveles de este año se han situado en el 82 %, frente al 85 % de 2022 y del 87,9 % de prepandemia, según ha señalado este mañana la presidenta de la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM), Maria Frontera, en la presentación del primer balance de actividad turística.

Respecto a julio, «en estos momentos la previsión de ocupación está en el 90 %, pero hay muchas incertidumbres que pueden afectar al normal desarrollo de los indicadores turísticos, entre ellos la huelga convocada por los sindicatos en el aeropuerto londinense de Gatwick a finales de este mes».

Frontera añadió que lo sucedido en junio, con las variables de problemas aéreos, ventas de último momento, la adversa climatología en la Isla y los problemas en los mercados emisores europeos «genera en estos momentos una serie de incógnitas de lo que puede pasar, ya que las previsiones de tráfico de AENA en el aeropuerto de Palma son más bajas de lo previsto, aunque para el mes de septiembre la situación cambia».

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Reconoció que la subida de precios media había oscilado entre el 6 y e 10 % para todo el verano «pero cada empresa actúa de la forma más adecuada en todo lo relacionado con los descuentos para tener mejor ocupación». En cuanto a septiembre, la FEHM prevé que será «un buen mes» con una estimación de ocupación del 55 por ciento. En este sentido, Frontera ha resaltado que tanto la pretemporada alta como la postemporada alta «se van afianzando».

Frontera ha explicado que la touroperación sigue siendo importante y representa hasta un 56 % en algunos meses y supone, además, estancias más largas que las contrataciones directas. Sobre los precios, la presidenta de la FEHM ha señalado que siguen una trayectoria al alza debido a los incrementos de los costes. Así, ha explicado que «no se está jugando con los precios para atraer más volumen sino que se está manteniendo un precio adaptado a la demanda».

María Frontera ha resaltado que este año se ha seguido la tendencia de las aperturas tempranas que se inició tras la salida de la Covid y ya no solo en Palma. Así, ha indicado, este año el 61 por ciento de la planta hotelera abrió en marzo (un 30 por ciento más que en 2022). Esto, ha argumentado, tiene efectos beneficiosos en la contratación y permite tener equipos entre ocho y diez meses trabajando en varias zonas de Mallorca. En este punto, ha instado a la administración a impulsar que los servicios en las zonas turísticas estén disponibles y habilitados todo el año y ha animado al sector comercial y de la restauración a acompañar al sector del alojamiento.