Firma de documentos en una notaría.

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El 86 % de las herencias de las Islas beneficiadas por la supresión del impuesto de sucesiones y donaciones (ISD) no pasa de los 700.000 euros. Según datos de la Agencia Tributaria de Balears (ATIB), fueron hasta 19.311 contribuyentes los que pagaron en 2022 por herencias de hasta esa cuantía (la franja más baja de base imponible) en el caso de los grupos uno y dos de parentesco (padres e hijos, abuelos y nietos y cónyuges), precisamente los grupos para los que se ha eliminado el pago del impuesto en su totalidad.

Asimismo, si se toman en consideración también las herencias de hasta esa cuantía del grupo 3 -entre hermanos y entre tíos y sobrinos, que cuentan desde el pasado julio con reducciones del 50 % o el 25 % según si existen o no descendientes directos-, el número de contribuyentes ascendió a 21.077, el 95 % del total.

Para el conseller d'Economia, Hisenda i Innovació, Antoni Costa, los datos de la ATIB apuntalan el argumentario del PP en su defensa de la supresión del impuesto, basado sobre todo en el hecho de que la inmensa mayoría de beneficiados por la medida no se corresponde con patrimonio millonarios. «Se demuestra que las herencias más numerosas son las de menor cuantía, por lo que los más afectados por la reforma de la normativa son las rentas medias y bajas de Baleares», destaca Costa.

Asimismo, el conseller arguye que la decisión de eliminar el impuesto para los grupos uno y dos se fundamenta en que «consideramos que se trata de un impuesto que es más familiar que individual». Así, explica que «entendemos que no se debe pagar cuando se trata de una herencia dentro del marco de una familia que ha acumulado un determinado patrimonio durante generaciones».

Por lo que respecta a la recaudación que supuso el desembolso de estos contribuyentes (de los grupos uno al tres), asciende a 40,76 millones de euros, el 46 % del total (88,3 millones de euros). Con todo, la supresión al 100 % para los grupos uno y dos supone la pérdida de 44,18 millones de euros en recaudación, de los cuales un total de 13,36 millones se corresponden con las herencias de menos de 700.000 euros. Las herencias con la base más elevada, de más de tres millones de euros -la última franja- recaudaron 6,78 millones de euros (el 15%) abonados por un total de 32 contribuyentes (0,15 %).