Pleno del Parlament como el que debatirá los Presupuestos. | Pere Bota

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Tras la aprobación del techo de gasto y el rechazo de las enmiendas a la totalidad, empieza ahora en el Parlament el debate de las enmiendas parciales, los cambios concretos a las diferentes secciones. Todos los grupos han presentado, incluso el PP –que introduce 73 propuestas de cambio–, algo habitual en la tramitación. Vox ha presentado 30, una para eliminar subvenciones a sindicatos y organizaciones (y que no se aprobará) y otra para dedicar 20 millones de euros a la puesta en marcha del llamado plan piloto para la libre elección del lengua.

El PP lo considera «excesivo» y es muy improbable que se apruebe en las condiciones que reclama. Otra cuestión es que, a lo largo de la tramitación, se pueda utilizar como moneda de cambios para otras propuestas. El vicepresidente y conseller d’Economia, AntoniCosta, también consideró exagerada la cantidad y recodó que la Conselleria d’Educació todavía no ha cuantificado el gasto.

Este viernes terminó el plazo para presentación de enmiendas. El debate empezará en comisión y luego, las que no se hayan aprobado, se mantendrán para el pleno final, la penúltima semana de diciembre.

Son 907 a las diferentes secciones y 139 al articulado. El grupo que más presenta es el PSIB, casi 600. Según indicó este viernes Iago Negueruela, el PP está «pagando las obsesiones de Vox» con unas cuentas «que no están pensadas para responder a la realidad de Balears y suponen un abandono de la ciudadanía». Entre sus reclamaciones está la recuperación del Impuesto de Sucesiones y Donaciones (ISD) y la reversión de la reforma fiscal del PP, «que solo sirve para amnistiar a unos pocos». También plantea la gratuidad del transporte pero no «con cartas como las que se envían a los Reyes Magos» (en alusión a las misivas del Govern de Prohens al Eejecutivo estatal) sino con una redistribución de partidas.

Así plantea propuestas del llamado ‘escudo social’. Més per Mallorca ha presentado 140, que mueven 132 millones, entre ellas suprimir la partida destinada a promoción turística, con la intención de «transformar la economía». Igualmente pide no dotar a la oficina lingüística que dirigirá Vox: nace con 750.000 euros.

El apunte

Costa no entiende las quejas del diputado Córdoba

El último quebradero de cabeza para el Govern viene del único diputado de Formentera, Llorenç Córdoba, que ha presentado 8 enmiendas y que ha dicho esta semana que no votará siempre con el PP. Antoni Costa dijo que no entiende su posición y que en las últimas reuniones mantenidas con él no se le había trasladado «ningún tipo de discrepancia».