Marcos Camacho en una imagen promocional. | R.L.

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Con más de 60.000 seguidores en Instagram, Marcos Camacho (Murcia, 1986) se ha convertido en un influencer de la maternidad y todo lo que conlleva. Esta semana ha participado en la X Jornada Balear de Lactància Materna organizada por el Col·legi Oficial d’Infermeres i Infermers de les Illes Balears (COIBA) con motivo de la Semana Europea de la Lactancia.

Recordemos por qué es importancia la lactancia materna.
Hay que promocionarla por sus beneficios, porque protege de múltiples enfermedades. Al bebé le previene contra la diabetes, la obesidad, el colesterol... Se ha descubierto que tiene la alfa fetoproteína que ayuda a la prevención o tratamiento de un tipo de leucemia. Y a la madre le previene la osteoporosis, artritis e incluso el cáncer de mama o de ovario. Y cuanto mayor sea el tiempo de amamantamiento, mayores beneficios de protección, por eso es bueno prologarla, cuanto más mejor. Pero el sistema que tenemos no permite conciliar para amamantar, les decimos que convienen dos años pero el permiso es de 16 semanas. Hay que hablar más de cómo los sanitarios pueden ayudar a las madres y la realidad es que faltan profesionales.

La generación de nuestras madres dice: «pues yo di leche en polvo y ha salido bien».
No pasa nada si hay madres que no quieren o no pueden dar el pecho. Tiene derecho. Pero los estudios científicos dicen que los bebés criados con leche materna tienen un mayor beneficio. En esta generación que se crió con leche de fórmula hay más celiaquía, más alergias.

¿Van los permisos de maternidad y paternidad acorde con las necesidades de los bebés?
Por supuesto que no. No sólo para la lactancia sino para criar. Estamos dando permisos pensados para que las madres se reincorporen rápidamente a producir, como si criar no fuera suficiente trabajo. Hay países de Europa con permisos muy largos. Nosotros queremos igualar los del padre y la madre para evitar la discriminación pero el bebé come de la madre y no del padre.

¿Hasta cuándo hay que dar pecho?
Las recomendaciones son que de forma exclusiva los seis primeros meses y de forma complementaria hasta los dos años pero yo siempre les digo que hasta que ellas quieran porque la realidad no suele acompañar.

En Balears no hay matronas suficientes en plantilla, van con falta de tiempo ¿eso repercute en la falta de ganas?
En las ganas no lo creo porque el trabajo es muy vocacional. Sin embargo tenemos un problema que se va a agravar en los próximos años. La tasa de matronas de España es la mitad de la media de los países de la OCDE, tenemos 3 y ellos 6. Si yo tengo citas de 15 minutos, ¿cómo haré una buena consulta de lactancia, si para que esté bien hecha necesito una hora? Los que gestionan no adecuan los ratios. ¿Por qué faltan matronas? Por los contratos precarios, la sobrecarga y porque se forma a menos gente de la que se está jubilando.

Pero ahora bajan nacimientos.
Pero siguen faltando, y yo trabajo en el paritorio pero las que están en Atención Primaria también dicen que no les da tiempo. Imagina las que están en planta, no es lo mismo tener que llevar a seis mujeres con sus bebés, que a 15. La diferencia se nota en la calidad asistencial y en la seguridad.

Dar el pecho no es fácil, las tasas de lactancia materna o de abandono indeseado son altas ¿por qué?
Yo creo que es por la falta de apoyo a las mujeres porque faltan profesionales. En otros países hay una matrona que va cada día a la casa de la mujer después del alta y aquí, si viene alguien apenas 10 minutos pero no le acompaña... Además están las políticas de conciliación, que son irrisorias. La conciliación materna no existe.

Dicen que el sector ginecológico u obstétrico es el menos humanizado.
Hay que individualizar. Falta mucho para humanizar el nacimiento, cada vez hay más inducciones, cesáreas, más partos intervenidos. Se dice que está mejorando pero va muy lento y se necesita un cambio más rápido porque las mujeres ya lo demandan, tienen que ser las dueñas de su parto. Para humanizar necesitamos tener ratios en condiciones. Yo no puedo asistir igual si llevo a una mujer o a tres a la vez. Lo que prima es la seguridad de la mujer. Habría también que mirar la de ginecólogos la ratio y si el sistema sanitario debería apostar más por las matronas que nos dedicamos a la asistencia del parto natural.

También es experto en el duelo perinatal.
Se está mejorando la atención pero todavía es un estigma, sigue siendo un tabú y si es una interrupción voluntaria se las juzga y condena más, sin entender sus necesidades.