El precio de la vivienda está disparado en Baleares. | Josep Bagur Gomila

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Baleares es la única comunidad autónoma con el precio de la vivienda más caro que antes de la burbuja inmobiliaria del año 2007. Así lo ponen de manifiesto las tasaciones de Tinsa by Accumin, que precisa que se han encarecido un 16,9 %. De lejos le sigue la Comunidad de Madrid, la región que más se aproxima al valor alcanzado en el ‘boom’, pero aún sigue un 2,5 % por debajo de su referencia de máximos.

Si se toma como referencia a las capitales de provincia, Palma y Málaga son las dos únicas que, según las tasaciones de Tinsa by Accumin, superan los máximos de la burbuja de 2007: un 12,1 % y un 4,6 %, respectivamente. Muy cerca se encuentran Madrid, aunque aún sigue un 0,2 % por debajo; y Santa Cruz de Tenerife, un 1,2 % inferior.

Baleares lidera la subida de precios

Otro dato relevante que se desprende del citado informe es que Baleares también es la región en la que más ha subido el valor de la vivienda en 2024, exactamente un 10,8 %. Le siguen Cantabria, con un alza del 8,5 %; Canarias, 7,1 %; Madrid, 7 %; La Rioja, 6,7 %; la Comunidad Valenciana, 6,5 %; y Asturias, 6,4 %. Solo las ciudades autónomas de Ceuta (-2,5 %) y Melilla (-1,5 %) registraron pequeños ajustes a la baja respecto al último trimestre de 2023.

Estos datos corroboran que el precio de la vivienda está totalmente disparado en el Archipiélago balear y se ha convertido en uno de los principales problemas a los que tienen que hacer frente. Personas de clase media han quedado excluidas del mercado inmobiliario, al que ya no tenían acceso los ciudadanos más desfavorecidos.

El informe de Tinsa también resalta que Baleares es la provincia más tensionada de toda España, ya que un hogar medio necesita destinar el 67 % de su renta disponible al pago de la hipoteca de su primera vivienda. Les siguen Cádiz, con el 43 %; Madrid, con el 40 %; Barcelona y Alicante, con el 39 % cada una de ellas.

Cristina Arias, directora del Servicio de Estudios de Tinsa, prevé que «con el comienzo de las bajadas de tipos de interés de referencia por parte del BCE desde junio de 2024, el coste hipotecario debiera irse reduciendo, lo que contribuiría a mantener un esfuerzo razonable. «Sin embargo, la estimulación de la demanda ante una mayor facilidad de acceso a crédito en combinación con el contexto de escasez de oferta actuaría de contrapeso, generando tensionamientos en los precios que continuarán dificultando el acceso en ciertas zonas de concentración de la demanda», razona.