El presidente del Gobierno, José María Aznar, presentó ayer el plan
de infraestructuras 2000-2007, que prevé una inversión en este
sector de 19 billones de pesetas hasta el año 2007 y en el que
tendrá cabida la iniciativa privada, que aportará el 18'4 por
ciento de la cantidad total, equivalente a unos 3'5 billones de
pesetas. La mayor parte de la inversión total estará dedicada a las
infraestructuras relacionadas con el transporte, que recibirán el
53 por ciento de la citada cantidad.
El jefe del Ejecutivo subrayó que el objetivo de este plan será
«superar el déficit crónico de España en esta materia y alcanzar la
convergencia con Europa y el pleno empleo». Por contra, el portavoz
de Infraestructuras del PSOE, Jesús Caldera, consideró
«insuficiente» esta inversión, a la vez que pidió «claridad y
transparencia», ya que «no sabemos exactamente a cuánto asciende
este plan». Calificó, además, de «tomadura de pelo» que el
presidente Aznar presente el Plan de Infraestructuras con el
Parlamento disuelto.
Las principales partidas del plan de inversión en
infraestructuras serán el ferrocarril y las carreteras para los que
están previsto una inversión de 4'7 y 4 billones de pesetas,
respectivamente.
El programa también comprende una inversión de 600.000 millones
de pesetas en la ampliación de los aeropuertos de Madrid y
Barcelona y actuaciones en otros aeropuertos que «sostienen el
grueso del tráfico turístico» como son Málaga, Alicante, Balears y
Canarias.
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