Fotografía de archivo de Antonio González, soldado de reemplazo de 22 años fallecido de leucemia.

TW
0

Federico Trillo, que recordó que España no ha tenido, no tiene ni tendrá munición de uranio empobrecido y que las tropas españolas están desplegadas en zonas donde ésta no ha sido utilizada, indicó que de los test practicados hasta el momento no han resultado indicios de enfermedades o patologías derivadas de radiación.

Así, señaló que el caso del militar fallecido en octubre, el sevillano Antonio González López, corresponde a una leucemia aguda no linfoblástica, cuya causa no tiene relación con la presencia de uranio empobrecido, y que la incidencia estadística general de esta enfermedad es de un caso cada 33.000 habitantes. Insistió, igualmente, en que este militar nunca estuvo destinado en Kosovo, sino que su puesto de trabajo estaba en el destacamento logístico próximo a Skopje (Macedonia), país que, dijo, nunca ha estado en guerra ni ha sufrido ataques con munición de uranio empobrecido.

La familia de Antonio Gonzaléz asegura por su parte que el soldado sí que realizó misiones puntuales en Pristina a pesar de estar destinado en Macedonia, y advierte que pedirá responsabilidades a la administración española si finalmente se demuestra la relación entre la exposición a la radiación y la patología oncológica que le causó la muerte. Así lo aseguró el hermano del fallecido, José Luis González.

Trillo, que ha mantenido y mantiene estos días contactos con sus colegas europeos y con el embajador de España ante la OTAN, Juan Prat, se mostró de acuerdo con su homólogo portugués, Julio Castro Caldas, en la conveniencia de que sean los órganos de la Alianza Atlántica quienes sigan examinando a fondo las causas del problema, sin perjuicio de que cada país continúe realizando las pruebas y test que considere oportunos.