El presidente del comité de gobierno de UDC y futuro secretario
general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, aseguró ayer que el
«temido efecto Maragall es ya una cuestión del pasado», por lo que
CiU «ahora sólo depende de sí misma» para ganar las próximas
elecciones autonómicas.
Duran, que clausuró ayer en Mataró la octava edición de la
escuela de verano de Unió, se refirió de esta manera a las
expectativas que había despertado el presidente del PSC, Pasqual
Maragall, quien, según Duran, «se diluyó como un azucarillo en un
café caliente» porque «ha llevado a los socialistas a la
desorientación».
El dirigente democristiano recordó que, en la última sesión de
control parlamentario al Gobierno catalán, Maragall «llegó a agotar
el tiempo de su intervención leyendo titulares de prensa sin llegar
a formular la pregunta a Pujol». Recordó que, en otra ocasión, la
ausencia del líder socialista en la Cámara catalana evitó una nueva
derrota de CiU.
Por su parte, el secretario general del Partido Popular (PP),
Javier Arenas, aseguró ayer que «es muy difícil que muchos de los
socialistas catalanes que creen en España se sientan representados
por Maragall». Arenas hizo estas declaraciones en el marco del
Convención del PP de Catalunya que se celebró en Sant Cugat del
Vallès. El secretario general del PP criticó la figura de Maragall
asegurando que a su alrededor «había mucho humo y es un globo que
se ha pinchado». Según Arenas, esto se produce porque «es muy
difícil mantener durante tanto tiempo la confusión de presentarse
todos los días como mitad socialista y mitad nacionalista».
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