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Fernando García Jodrá, uno de los cinco detenidos del «comando Barcelona» que compareció ayer ante el juez Baltasar Garzón, reconoció ante la Guardia Civil su participación en cuatro asesinatos de ETA y dijo que intentó matar ocho veces al periodista Luis del Olmo y que entre sus objetivos estaba el ex presidente de la SEPI Pedro Ferreras. García Jodrá declaró que tenía la orden de la dirección de ETA en Francia, cuyo contacto era un hombre al que identificó como Luis Eduardo Roncero Retortillo, de matar al ex presidente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) Pedro Ferreras así como a políticos, militares y periodistas.

García Jodrá explicó que el periodista Luis del Olmo era su objetivo personal y que para preparar su asesinato tuvo que solicitar la autorización de la dirección de la banda terrorista, a la que además debía consultar los atentados que pretendieran cometer contra personalidades del Partido Socialista de Cataluña, a pesar de que los socialistas son objetivos generales de ETA. Además, García Jodrá relató a la Guardia Civil las ocho ocasiones en las que trató de asesinar a Luis del Olmo con al anterior comando Barcelona, desarticulado el pasado mes de enero.

Así, manifestó que en junio del año pasado lo intentaron con un coche bomba, que no llegó a estallar, al fallar el mando a distancia y lo volvieron a intentar dos días después con el mismo coche, un Renault 19, aunque tuvieron el mismo fallo. También trataron de asesinarle a tiros en la calle, pero el día previsto Luis del Olmo y su escolta no pasaron por el lugar elegido y días después le volvieron a esperar con la misma intención y tampoco lo consiguieron. Al poco tiempo, recurrieron de nuevo al coche bomba, aunque esta vez falló el detonador.

La última vez que lo intentaron, también con coche bomba, fueron sorprendidos por el guardia urbano Juan Miguel Gervilla, que fue asesinado de un tiro por José Ignacio Cruchaga, detenido el mes de enero, según la declaración de García Jodrá ante la Guardia Civil. García Jodrá reconoció su participación en este asesinato, así como en el del concejal del PP de Sant Adriá José Luis Ruiz Casado y del concejal del PP de Viladecavalls Francisco Cano Consuegra, del que dijo que fue Lierni Armendáriz, también detenida el mes de enero, quien abrió la furgoneta y colocó la bomba lapa. También reconoció su participación en el asesinato del ex ministro socialista Ernest Lluch, del que dijo que era un objetivo marcado por la organización en Francia, aunque especificó que fue Cruchaga quien disparó las dos veces y él sólo se limitó a llevarle en el coche.