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La investigación parlamentaria sobre el 'caso Gescartera' podrá llevarse a cabo por fin en base al principio de acuerdo que las direcciones de los grupos parlamentarios del PP y del PSOE alcanzaron ayer, para constituir la Comisión que, a partir del próximo día 7 y con un plazo mínimo de tres meses, se encargará de realizar estos trabajos. Ante la posible presidencia de Convergencia i Unió (CiU) de esta Comisión, el portavoz de la coalición en el Congreso, Xavier Trías, aseguró que asumirá esta función si su funcionamiento se plantea de forma constructiva, mientras que desde la cúpula de Izquierda Unida, se ha tachado esta iniciativa de «estafa democrática» porque el PP no quiere entrar en las responsabilidades políticas.

El próximo martes, la Mesa y la Junta de Portavoces del Congreso se reunirán, como estaba previsto desde antes del verano, con el objetivo de convocar para el día 6 de septiembre un pleno extraordinario donde se aprobará la creación de la Comisión de Investigación parlamentaria para desvelar las dudas que en materia de control gubernamental se han generado en torno al 'caso Gescartera'. Un día después, el órgano quedará constituido con un plazo mínimo de tres meses para sus trabajos, prorrogables por acuerdo, para establecer sus conclusiones.

Aunque en un principio, el PP había propuesto dos meses y el PSOE hablaba de un mínimo de seis, finalmente, ambas formaciones alcanzaron ayer acuerdo, ultimado por el portavoz de Economía del PP, Vicente Martínez Pujalte y por el diputado socialista Antonio Cuevas, miembro de la dirección del Grupo Parlamentario del PSOE, que previsiblemente serán los portavoces de los grupos mayoritarios en la Comisión. Por el momento, queda por determinar quién ocupará la presidencia de la comisión, aunque las circunstancias apuntan a que recaerá en algún representante de las formaciones nacionalistas, presumiblemente de CiU.

Trías declaró que los nacionalistas catalanes aceptarán esta posibilidad si se afronta con «voluntad constructiva» y no como un enfrentamiento entre el Gobierno y la oposición. En su opinión, el plazo que se establezca para los trabajos de la Comisión de Investigación no deben ser el objeto central de las discusiones previas, pues sostiene que debe dejarse abierta la posibilidad de mantener la Comisión hasta que se acabe su labor.