La juez de la Audiencia Nacional Teresa Palacios ha solicitado al
ecónomo del Arzobispado de Valladolid, Enrique Peralta, que aporte
al Juzgado los libros de contabilidad correspondientes al periodo
de 1996 a 1999, así como documentación fiscal de «toda índole». El
ecónomo, que prestó declaración como testigo ante la juez, aseguró
que la inversión de 1.105 millones en Gescartera se realizó a un
interés garantizado del 10%. El ecónomo se refirió a esta inversión
como de «renta fija», a lo que el teniente fiscal Anticorrupción,
Luis López Sanz, replicó que la documentación que obra en la causa
muestra que se trataba de renta variable.
Al igual que explicó la noche del lunes ante la comisión de
investigación del Congreso, aseguró que retiró la inversión al
comprobar que Gescartera estaba siendo investigada por la CNMV y
por recomendación del arzobispo. Sin embargo, la devolución del
importe total fue efectuada por Camacho personalmente y mediante un
talón, a pesar de que en un principio afirmó que las únicas dos
personas que conocía de Gescartera eran Valenzuela y García
Tejerina.
Ante la Comisión de investigación Parlamentaria declararon dos
de los clientes de Gescartera. El jefe del Estado Mayor de la
Armada, almirante Francisco Torrente, aseguró que la Seguridad
Social de la Armada retiró el dinero invertido en la agencia de
valores por la falta de rentabilidad y no por haber recibido
información privilegiada. Así, explicó que actuaron a tenor de los
retrasos habidos en los pagos de los intereses de las inversiones
realizadas, por lo que «parece que era de sentido común desconfiar
de esta sociedad, lo que justifica sobradamente la decisión tomada
en enero de 2001 de no continuar invirtiendo en ella». Torrente
reconoció que el consejo directivo de la Armada no estuvo
adecuadamente informado cuando se empezaron a retrasar los
reembolsos, porque las noticias que se les enviaban no eran
correctas o eran insuficientes.
El presidente de Cetarsa y ex diputado del PP, Isidoro
Hernández-Sito, aseguró por su parte que las operaciones en
Gescartera se hicieron bajo una decisión comercial y sin que
mediaran influencias. Mientras, el ex supervisor de la Comisión
Nacional del Mercado de Valores, David Vives, que en abril de 1999
abogó por intervenir Gescartera, acudió ayer personalmente al
Congreso para entregar la documentación complementaria relativa a
su trabajo de inspección. Pero él considera que esta información es
insuficiente y ha pedido a la presidenta del Congreso que se dirija
a la CNMV para que le permita buscar los documentos que permanecen
en su sede.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.