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Antes de que comenzara la sesión del 'caso de los fondos reservados', el presidente de la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Madrid, Francisco Vieira, hizo público un comunicado en el que responde a la denuncia que hizo el fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, sobre su actitud tolerante ante el «inaceptable» comportamiento de José Barrionuevo durante su interrogatorio. El tribunal advierte que «no va a tolerar influencia alguna fuera o dentro de esta Sala».

En el comunicado se pide moderación a los acusados, y se recuerda que el tribunal tiene «la obligación de preservar su imparcialidad y su independencia», así como el derecho de defensa. Además, pidió a los abogados que prescindan de realizar preguntas argumentativas. Con esto no queda cerrada la polémica, porque el presidente del Consejo General del Poder Judicial, Javier Delgado Barrio, solicitó un informe escrito al presidente de la Sala en el que exponga su versión de los hechos que denunció Cardenal. Será el propio Delgado el que decida qué trámite da al escrito que el fiscal del Estado le remitió el martes.

En la sesión del martes, el tono empleado por Barrionuevo en sus respuestas al fiscal "cuyas preguntas y acusaciones calificó de «insidiosas» y «calumniosas»" llevó al representante del ministerio público a estimar que «el nivel de impertinencia del señor Barrionuevo quizás está excediendo de lo tolerable». Ayer, los ex ministros del Interior José Barrionuevo y José Luis Corcuera acusaron al fiscal del Estado, Jesús Cardenal, de coaccionar al Tribunal que juzga el «caso de los fondos reservados», y el primero dijo que Cardenal «quiere vernos de rodillas y con los brazos abiertos» en el banquillo.

Barrionuevo atribuyó también ese deseo al fiscal del caso, Alejandro Luzón, y a su padre, José María Luzón, «número 2» de la Carrera Fiscal, y aseguró que «el fiscal es un lince, pero en cuanto le hacen un arañazo corre a decir papá pupa». Barrionuevo tildó de «inadmisible» la actuación de Cardenal y dijo que el presidente del Tribunal, el magistrado Francisco Vieira, «ha hecho una cosa elemental, dejar que nos defendamos después de siete años de investigación». Sobre José María Luzón, el ex ministro dijo que «no tengo constancia de que 'papá' haya intervenido en defensa de ningún otro fiscal en ningún otro caso».

Por su parte, Corcuera pidió al fiscal general que le defienda a él «no como a Piqué, sino la cuarta parte que a Piqué», en referencia a la supuesta relación del ministro de Exteriores con el «caso Ertoil». Corcuera, que el martes mantuvo un agrio enfrentamiento con el fiscal, volvió ayer a acusar a éste de mentiroso, a propósito de las preguntas que le hizo acerca de dos cheques firmados el 12 de julio de 1988. El abogado del ex ministro, aportó ayer al Tribunal una certificación que demuestra que, a pesar de que su nombramiento se publicó en el BOE el 11 de julio, Corcuera no juró su cargo hasta el día siguiente, fecha en la que apenas pasó unas horas en su despacho.