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Las autoridades mexicanas extraditaron ayer a España al histórico etarra José Antonio Borde Gaztelumendi, alias 'Petxu' al que se le atribuyen 21 atentados entre 1978 y 1983, en los que se produjeron 16 muertos y 18 heridos.

El ministro del Interior, Àngel Acebes, señaló que el activista, que llegó ayer a Madrid, es uno de los etarras «más reclamados» por ser «un terrorista sanguinario y peligroso».

Borde Gaztelumendi, de 43 años, se encuadró en 1978 en el 'comando UPO' de ETA, que actuaba en Vizcaya. Tras participar en un atentado en el que resultaron muertos un empleado de la autopista Bilbao-Behovia y un guardia civil, huyó a Francia. Reapareció en 1980 cuando supuestamente participó en el robo de 8.000 kilos de explosivos del polvorín de la localidad cántabra de Soto de la Marina. Un año después, volvió a España y se integró en el 'comando Vizcaya'. Sólo en 1981 participó en siete atentados en los que murieron seis personas y otras once resultaron heridas. Se trató del asesinato de un teniente coronel, en Bilbao, el 19 de marzo; un atentado contra una patrulla de la Policía en la misma ciudad, en el que murió un agente y otros dos resultaron heridos, el 9 de abril; y el asesinato cinco días más tarde de un teniente coronel retirado de la Guardia Civil.

Justo un mes más tarde, el 14 de mayo, el 'comando Vizcaya' atentó contra una patrulla de la Guardia Civil en Lemona, y murieron dos guardias y otro resultó herido. El 14 de junio, cuatro miembros de la Benemérita resultaron heridos al ser ametrallado su vehículo, y el 2 de julio, tres policías sufrieron heridas al explotar una bomba al paso de dos coches de la Policía Nacional. El 10 de julio participó en el asesinato de un guardia civil retirado en Basauri (Vicaya). En febrero de 1983, 'Petxu' volvió a integrarse en el 'comando Vizcaya', con el que cometió otros ocho asesinatos. Las víctimas fueron dos inspectores de Policía y una mujer; el jefe de la Policía Municipal de Baracaldo y el propietario de una cafetería de Algorta.

El 4 de mayo de 1983 cometió en Bilbao el último atentado que se le atribuye. En él murieron tres personas. Después huyó a Francia, donde, según Interior, apoyaba las actividades de las estructuras directivas de ETA.