Ayer llegaron a la Coruña los tres barcos enviados por la Generalitat.

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El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, apostó ayer por un «programa de Gobierno» de los socialistas que sea «sentido y compartido por una amplísima mayoría de la ciudadanía». El líder socialista acusó a Aznar de gobernar al margen del Parlamento, como demuestra los impedimentos de su Ejecutivo para constituir una comisión de investigación sobre el «Prestige» y la ausencia de explicaciones en el Congreso sobre el papel de España en la crisis de Irak. Zapatero clausuró una jornada para la constitución de tres nuevas organizaciones sectoriales del PSOE, en la cual defendió la validez de la plataforma que este partido va a promover para recabar ideas que conformarán la alternativa electoral socialista, con la participación inicial de 500 personas de todos los ámbitos sociales.

Reprochó al PP que haya logrado que la comisión de investigación del Parlamento gallego sobre el «Prestige» «nazca sin futuro», por lo que remarcó la necesidad de abrir otra comisión en el Congreso.

Según proclamó, esta petición no es del PSOE ni responde a «ningún intento ni de criticar, ni de atacar», sino a «un derecho de la ciudadanía, es una exigencia de la democracia que se conozca qué pasó para que no vuelva a repetirse la catástrofe en Galicia». El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, afirmó por su parte que Rodolfo Martín Villa, nombrado comisionado del Gobierno para las actuaciones derivadas de la catástrofe del «Prestige», «enterrará todas las consecuencias políticas» del vertido. Llamazares resaltó que Martín Villa actuará como «inquisidor», no investigará la catástrofe y acusará a las organizaciones sociales y a las fuerzas de la oposición de ser las responsables, algo que en su opinión pasa ya con la plataforma «Nunca mais».

El grupo del BNG abandonará la Comisión de Investigación sobre el «Prestige» la próxima semana si el PP «no cambia de rumbo» y no atiende las peticiones de la oposición para que este órgano no quede «vacío de contenido». Desde el Gobierno, el ministro de Administraciones Públicas, Javier Arenas, hizo un llamamiento a los socialistas y, en concreto, a su secretario general, José Luis Rodríguez Zapatero, para que «no atente contra los intereses nacionales presentando comisiones de investigación sobre el «Prestige» en el Parlamento Europeo que sólo tienen la finalidad de dificultar la llegada de fondos europeos a Galicia para paliar el desastre del petrolero hundido».