Zapatero y Caldera conversan con Blanco durante el debate de los Presupuestos para 2004.

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Caldera anunció la propuesta de los socialistas de destinar 1.500 millones de euros a crear escuelas infantiles, 720 millones a un plan de choque en I+D, y dos partidas de 300 millones de euros, una para el mantenimiento de la red ferroviaria y de carreteras, y otra para mejorar la dotación de las fuerzas de seguridad y de la Justicia para combatir la delincuencia.

Caldera afirmó que esta propuesta es «realista» y con un contenido social «dirigido a resolver los problemas de las familias españolas» con un dinero, recalcó el portavoz socialista, que «dice el Gobierno que sobra».

Los socialistas proponen también que, de esos 3.500 millones de pesetas, 250 se destinen a una agencia pública de alquiler de viviendas y 200 al Plan Galicia, que Caldera consideró que está «muy desatendido».

Esta iniciativa socialista se completa con 120 millones de euros para infraestructuras de puertos y aeropuertos en Canarias, 100 millones más para becas y cinco millones de euros para el Tribunal de Defensa de la Competencia y otros tantos para crear una Oficina de Información Parlamentaria en el Congreso.

El PSOE concreta con estas propuestas lo anticipado el martes por su secretario general, José Luis Rodríguez Zapatero, durante el debate de presupuestos, al afirmar que con un Gobierno socialista no habría superávit presupuestario «mientras tengamos tantas necesidades sociales».

El portavoz de Economía de PP, Vicente Martínez-Pujalte, aseguró que el portavoz parlamentario socialista hace el «ridículo» al plantear un plan de inversiones con el superávit en vez de preocuparse por garantizar las pensiones y reducir la deuda pública.